Mi Hermanastro (elrubius)

Capitulo 20 (Maratón 3/3)

Había sangre. Un charco enorme de sangre. Y un chico encima de él. De ahí provenía la sangre, de una herida de bala que justamente le había pegado en el pecho. A mi novio. A mi chico. El chico ahora con el charco de sangre.

Mangel y Alexby miraban del otro lado como los médicos rápidamente levantaban el cuerpo de Ruben para poder llevarlo al hospital.

Me encontré con los ojos asustados de Mangel y me miró sorprendido. Le dio un codazo a Alex que me miró también y corrieron hacia mi. Saltaron la cinta de la policía y corrieron lo más rápido para poder abrazarme.

Cuando sentí ese par de brazos alrededor de mi, lloré desconsoladamente. ¿Cómo pudo pasar esto? Si ayer todos estábamos felices y nada nos preocupaba.

¿Que pasó? ¿Quién le disparó? ¿Por qué?...Tantas preguntas quería hacerle a mis amigos pero nada salia de mi boca. No encontraba mi voz y los sollozos no paraban.

Decidimos tomar un taxi y seguir a la ambulancia que iba con todas las sirenas puestas. Mangel llamó a Diane quién comenzó a gritar histérica. Yo permanecía en un estado de shock y rezaba internamente por que Ruben se pusiera bien y que no muriera.

Un joven de veintiséis años no merece morir así. A parte, no puede dejarme sola. No ahora que lo amo más que a nada.

Llegamos al hospital y al parecer, lo metieron directamente a sala de operaciones para sacarle a bala. La enfermera nos dijo amablemente que debíamos esperar y que tuvieramos paciencia y fe en que el iba a sobrevivir.

Nos sentamos en las duras sillas de la sala de espera y decidí hacerle algunas preguntas a Mangel y a Alexby.

-¿Qué pasó? -Dije en un susurro y los dos me miraron con dolor. Sabia que les hice recordar lo que había pasado pero debía saberlo.Debia saber que había pasado para que Ruben terminara con una bala en el pecho

Mangel suspiró y empezó a hablar- Irina se volvió completamente loca. Cuando tu llamaste y yo conteste fue porque Irina se dio cuenta que Ruben pasó contigo la noche y vino desde Barcelona por explicaciones. En ese momento estábamos en el aeropuerto pero no quise decirte nada para que no te alteraras y para no provocarle problemas a Rubius -Su voz se quebró y sus ojos se pusieron llorosos- Nadie se dio cuenta que ella traía un arma. Ni siquiera los putos oficiales del aeropuerto. Cuando nos dimos cuenta, un disparo sonó y Ruben cayó mientras Irina corría a toda velocidad. No sé si los oficiales lograron capturarla pero no me importaba en ese momento. Alexby y yo corrimos hacia donde Ruben y cuando vimos sangre brotar de su herida, supimos que era serio.
El encargado en ese momento llamó al 911 -Mangel sollozó y yo también estaba llorando.
Sabia que Irina estaba detrás de toda esta mierda y ahora por su culpa, Ruben estaba en peligro.

~•~

Pasaron ocho horas y no sabíamos nada. Mi padre y Diane se nos habían unido en la sala de espera. Diane estaba muy nerviosa y preocupada. La entendía bastante bien porque yo estaba igual pero eso no le hacia nada bueno a la bebé.

El doctor salió de la sala de operaciones. Se quitó los guantes llenos de sangre y también la mascarilla. Todos nos pusimos de pie y el doctor dijo.

-¿Familia de Ruben Doblas Gundersen? -Pregunto y todos asentimos- Bien, pudimos extraer la bala pero ha perdido mucha sangre. Ruben ha tenido mucha suerte porque si la bala hubiera penetrado un centímetro más a la izquierda, le hubiera dañado el corazón e hubiera muerto inmediatamente pero no fue así -El doctor suspiró- Pero... -Aqui viene el "pero"- lamento informarles que Ruben en este momento esta en coma -Sentí que toda la fuerza de mi cuerpo me había abandonado y no pude sostenerme. Caí de rodillas y lloraba muy fuerte. No podía estar en coma.

Mangel y mi padre me levantaron pero yo no podía mantenerme de pie.

-Por ahora, lo mantendremos en observación y le pondremos el respirador artificial -Prosiguió el doctor- Intentaremos salvar su vida pero no les puedo dar mucha esperanza. Es difícil que una persona con una herida así pueda sobrevivir. Lo siento -Y se retiró, así sin más.

Diane se había desmayado así que, tuvieron que llevársela mientras que yo, lloraba como una loca y al parecer, mi llanto no iba a detenerse en ningún momento.

Me dolía escuchar que no le daban esperanzas. No quería quedarme sola. No quería que el me abandonara. Esta historia de amor no podía terminar de esta manera tan trágica.

Alexby me abrazaba muy fuerte y a Mangel lloraba en silencio. De seguro el mundo esta paralizado al saber que Ruben recibió un balazo. Ya me imagino cuando sepan que esta en coma y que no hay esperanzas de que viva.

~•~

Pasaron tres días de mucha angustia y tristeza pero lo bueno de todo era que ya podíamos verlo. Diane entró primero, con mi padre.

Duró allí cuarenta minutos y me indicó que entrara. Le ofrecí a Mangel que entrara primero porque era su mejor amigo pero se negó, entonces yo entré.

Cuando entré, el chico que ahora estaba en esa camilla no se parecía al Ruben de hace unos días. El que hacia vídeos en Youtube y amaba los videojuegos. No se parecía en nada al chico del que estaba enamorada. No podía creer aún que Ruben estuviera con vida sólo por una tonta máquina.

Me arrodillé a su lado y sostuve su mano, cómo el lo hacia cuando yo estaba en el hospital. Mis mejillas estaban empapadas de lágrimas pero no podía dejar que él escuchara que estaba llorando.

Entrelace sus dedos con los míos y tome aire para poder hablarle.

-Hola amor mío -Jale mis mocos- Tanto tiempo sin verte -Con mi mano desocupada acaricié su cabello castaño- Te extraño tanto. Dios sabe que sí -Suspire

-Jamás pensé que unas horas después de haber estado juntos, te dispararían -Seguí luego de tomar aire. Ahora mi mano estaba en su mejilla- Te prometí que no iba a dejarte nunca. Pero ahora el que debe prometerme eso, eres tú -Mi voz se quebró y no pude hablar más.

Me di un tiempo para poder respirar y seguir hablando con él. No debía desperdiciar tiempo valioso.

-Lucha. Lucha por mi -Las lágrimas no dejaban de caer- Prometeme que no me dejarás nunca. Y que podrás superar esto porque yo sé que lo harás. No quiero que me abandones, por favor, por favor no lo hagas -Llore un poco más fuerte- No sabría vivir sin ti.

Sentí que sus dedos se movieron y yo rápidamente mire nuestras manos. De verdad se estaban moviendo. Solté su mano y corrí para llamar al doctor.

Rápidamente llego con dos enfermeras y me echaron de la habitación. Miré por mi hombro como revisan sus pupilas y yo, instintivamente sonrei al recordar como sus largos dedos se movían en respuesta a lo que yo le estaba diciendo.

~•~

Aquí esta el último capítulo del maratón.💋
¿Creen que los capítulos están siendo muy pequeños? Pueden decirmelo en los comentarios.😆
xoxo.❤