2. Idril I: Las increíbles aventuras del gran Idril. Primera parte

886 98 53
                                    


Como prometí en el capítulo anterior, este capítulo se lo dedicaría a quien primero adivinase de quién sería el POV, así que este gran honor se lo ha ganado...

 ¡hibbyta!^^

Los primeros capítulos de Idril son más aventureros que otra cosa (como podéis percibir por el título tan humilde del capítulo xD), mientras que los de Gelsey son más dramáticos xD Y los de Adri... Bueno, los de él serán muy intensos jajajaja

—————

«Yo estaba durmiendo a pierna suelta, exhausto por la dura noche que acababa de pasar, cuando vinieron a buscarme esos dos hechiceros ataviados con túnicas harapientas. Primero, aporrearon la puerta gritando algo de Kra Dereth. Eso no bastaba para penetrar la densa y viscosa nube onírica que me aprisionaba. Así que abrieron la puerta a porrazos, uno de ellos invocó entre chispas de colores un cubo de agua fría y los muy desgraciados ¡lo vaciaron sobre mí!

—Levántate o nos buscaremos a otro cronista —me dijeron antipáticamente mientras batallaba contra una dura resaca.

—¿Quién demonios quiere un cronista a estas horas? —Juro que el sol ni siquiera se atrevía a asomarse de su lecho, entonces ¿cómo iba a hacerlo yo?

—Kra Dereth ha sido derrotado.

—Así que ya sabes, si quieres la primicia, ya puedes ir espabilando.»

Hughes bon Humbert, Cronista Real del rey Varick III. Sobre la dura vida de un historiador


IDRIL I: LAS INCREÍBLES AVENTURAS DEL GRAN IDRIL. PRIMERA PARTE


Después de haber sobrevivido a varios intentos de asesinato, de descubrir que...

En realidad soy el hijo del mayor tirano que la Historia ha tenido la mala suerte de sufrir.

Que mi padrastro solo quería utilizarme para un plan extraño suyo de dominación mundial.

Que, al parecer, era el protagonista de una profecía también muy cuestionable en la que para salvar al mundo, debía casarme con la princesa más pánfila que jamás había conocido.

Que mi madre me concibió para que me sacrificara en dicha profecía.

Después de casi ser devorado por un dinosaurio rosa, de ser envenenado por una bebida del mismo color que el animal anterior, de ser golpeado por los rebeldes sádicos que querían asesinarme pero que parecían mi única forma de escapar de Gelsey...

Después de todas las cosas bizarras que me habían pasado en el último tiempo, por fin había llegado a Léiriú.


Y sin embargo, no quería mirar hacia delante.


Es decir, había caído sobre Faith. La mitad vampira había tenido la amabilidad de colocar sus mullidos pechos justo donde sabía que iba a yacer mi rostro excitado por la adrenalina de la caída, así que no me refiero a que no quería apartar mi cara de su carne marmórea, tibia por mi aliento, contra la que el oscuro perfume que emanaba me mantenía retenido, sino que era el horizonte, donde podían distinguirse las formas borrosas y difuminadas del que debería ser el estadio, lo que no quería escudriñar.


—Estás bien acomodado, ¿verdad, Idril? ¿Necesitas algo más?

—Me has salvado de una buena caída —repuse desde mi posición privilegiada.

La ilusión de Fehlion (Léiriú #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora