Aliados 01

23 0 0
                                    

El cuerpo entumecido de un muchacho se apoyaba a una pared con pesar, su brazo estaba sangrando y lo sostenía para evitar más la hemorragia... mirando al frente a la muchacha que la había lastimado.

-Que bien que te encontré... tenemos que hablar, querido comandante- sonaba alegre y satisfecha de encontrarlo; este solo la miraba en confusión, sintiendo a la vez impotencia.

-¿Quién carajo es comandante?- ante la pregunta, la joven se hecho a reír.

-Por supuesto que eres tú... ¿acaso lo olvidaste? Bueno, eso no importa... tú me serás de ayuda

-¿Y si me opongo?- interrumpiendo a un buen argumento, la joven apoyo con brusquedad sus manos en la pared y se acercó peligrosamente al muchacho; de no haber sido por la herida, el muchacho se hubiera intimidado.

-No me provoques- decía con un tono de seriedad tan profunda, que no se sabría decir si era ella o un dictador en pleno acto de genocidio –Tu bien sabes que le suceden a las personas que me enfrentan, ¿Por qué desperdiciar tu vida por un momento de valentía? ¿Acaso no sabes que eres valioso para mí? Tú forma de pensar, la capacidad de convencer a los otros con tu conocimiento y tu habilidad con los contactos... eso busco de un aliado- lo último lo decía con regocijo; extraño dirán, que el muchacho se sorprendió de los halagos de la joven, reacciono a lo que pretendía y seguía negándose

-Pero si voy contigo... que me asegura de que no lastimaras a mis amigos y a mi familia

-Esa es una ventaja de que trabajes para mí- interrumpe mientras le muestra el dedo índice –Estarás bajo mi protección, muchos piensan que mato por placer... lo cual no está del todo alejado de la realidad- ríe ligeramente y prosigue –Pero... la gran diferencia de mis actos... es que yo mato a quienes yo considero que deben morir.

ReminiscenceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora