Mi doctor y yo

Capítulo 16

Genial, lo único que necesitaba era ver a ese patán. De todas las personas que no espere ver de nuevo en mi vida, aparece el grandísimo tarado y encabeza la lista.

-Qué alegría volverte a ver princesssssa.- Dijo Jose arrastrando las palabras, ohhh esto no pintaba para nada bien, no era el mismo.

-Chocaste por detrás, pagarás la compostura de mi carro- Dije tranquilamente, la verdad es que el carro de él estaba peor, todo lleno de abolladuras y el mío apenas y un pequeño raspón.

-A no, eso no va conmigo, tu abollaste mi precioso carro- Dijo acercándose cada vez más a mí.

-Ah nooooooo, me pagas o te las verás conmigo- Dije ya molesta.- por Dios que costaba que se mantuviera alejado de mí, aparte de que no estaba en sus cinco sentidos este hombre

-Princiesaaaaaaaaaaaaa, animo, ven para aquí, añoro tus bosssssssssssos- Al acercarse a mí note un extraño olor que emanaba de su cuerpo, una mezcla entre Vodka, cerveza y algo como humo, supuse que era marihuana, definitivamente no iba a dejar pasar esto, no soy rencorosa, pero si iba a ser una futura abogada no podía dejar un hecho delictivo impune.

-Jose esta tomado y posiblemente drogado, es más, vete de paseo, llamaré a la policía.- Y sin más llamé a la policía.

No tardaron en llegar, como buena estudiante de leyes recite los hechos, mientras que a José le hacían una prueba en el alcoholímetro y señale según el código penal, las faltas que yo creía que él había cometido, para mi alegría se lo llevaron consignado por haber sobrepasado la prueba y demostrar que estaba sumamente drogado. Para mi mala suerte mi teléfono se quedó sin batería, no pude avisar que era lo que me había pasado.

Llegué tarde y lo primero que me encontré fue a un Ignazio muy molesto. Solo quería que acabara ese mal trago, pero cuando Ignazio se acercó vi en su mirada, estaba llena de preocupación.

-Vicky, ¿Qué te pasó?, ¿Estas bien?, ¿Por qué tardaste tanto?- Dijo abrazándome fuertemente al verme salir del carro.

-Larga historia, Jose me chocó, estaba ebrio y drogado debo añadir, lo mande consignado, debo presentarme mañana a la delegación para que le empiecen el proceso penal que le corresponde.- Dije sollozando, toda esta situación me puso los nervios a flor de piel y fue horrible.

-Vamos chica bella, no es nada- Dijo viéndome cada vez más cerca

-Sí, pero no es justo- Dije haciendo pucheros.

Luego de pasar una increíble cena junto a Igny y sus sobrinos me dirigí a mi casa.

Al llegar encontré un montón de globos rosados y azules. Me parecía muy extraño, encendí la luz y vi a mis padres charlando amenamente en el sillón sentados, ambos estaban con una sonrisa de oreja a oreja. Y desde hacía bastante tiempo no los veía así de felices.

-Cariño que bueno que vienes- Dijo mi padre muy animado

-Mi vida trae el pastel que está en la refrigeradora por favor.- Dijo mi madre muy amable

Era un pastel muy bonito, blanco con rosas blancas, me encantaba. Tome un cuchillo y unos platos y los lleve el comedor.

-Bien y la sorpresa- Dije emocionada

-Seras hermana mayooooooooooooooooor- Soltó mi padre energicamente

-Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee, noooooooo, y que serááááááááá -Dije emocionada dando saltitos en mi lugar .

-Vamos a averiguarlo- Dijo mi madre, y partió el pastel

-Seráááááá niñooooooooooooooooooooooo- Dijimos los tres al unísino.

Una noticia genial! Sería hermana mayor, estaba emocionadisima. Todo va de a poco encajando.

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Lo que Vicky e Ignazio y toda su familia no se imaginaban era que Milersy los había espiado todos esos meses, quería destruirla así como ella había destruido de a poco a Jose. Quería lastimarla en lo que más le doliera, su familia y a Ignazio.