Secreto Sucio → j.b (+16)

diecinueve

"Sé todo sobre ella. Todo lo que hay que saber."

→Capítulo dedicado a nino_arduz ← POR FIN NO? LOL

(Si queréis un capítulo dedicado, pedirlo en los comentarios)

PD: Como muchas me piden que les dedique un capítulo, voy de a poco. Lo siento si tardo.

Y antes de empezar quiero deciros que solo me quedan 4 capítulos para dedicar asi que tenéis 4 oportunidad jeje

Narrador Omnisciente

"También lo hace el karma" Las palabras resonaron alrededor de la cabeza de Kylie mientras se sentaba en la mesa circular con su familia, todos conversaban en voz alta, y ella miraba al vacío mientras ignoraba el sonido de Samantha diciéndole que le pasara la sal, su mente estaba tratando de descifrar qué es exactamente a lo que Kyle se refería con que el karma también trabaja misteriosamente.

Y no importó lo mucho que lo intentara, las palabras no salían de su mente, ni siquiera por un segundo. Así que no podía fingir que estaba comprometida con su familia, o como si no estuviera completamente dividida en dos zonas y perdida dentro de su propio mundo. No había tocado su plato de comida aún, su hermano se sentó junto a ella con una mirada de suficiencia en su rostro como si supiera lo que estaba pasando por la mente de su hermana. Pero él estaba esperando, esperando el momento adecuado para hacerle saber que él sabía todo acerca de sus actividades nocturnas con Justin.

Kyle estaba esperando pacientemente el momento en el que pudiera dar grandes zancadas hacia Justin con el puño listo para romperle la cara. Pacientemente, para decirle que se mantuviera lo más alejado posible de su hermana pequeña.  A pesar de que en el pasado nunca se había preocupado porque él engañaba a Sammy, tenía que cuidar esta vez de su hermana pequeña.

—Kylie, ¿estás bien?—Preguntó Erin, ladeando la ceja hacia su hija, que apenas había pronunciado palabra desde que habían salido de la casa. Llena de chupones de amor sin explicar nada.—Pareces que te vas a desmayar o vomitar.—Pronunció, ganándose la atención de Justin que había estado sentado con su brazo alrededor de Samantha, como un novio cariñoso, besándola en la mejilla después de cada palabra, susurrándole palabras dulces al oído mientras la hacía sonreír. Samantha le tocaba el hombro para que parara pero él seguía.

—¿Hm?—Dijo de nuevo en la realidad en un simple momento.—Si estoy bien.—Mintió,  mirando hacia su plato, usando su tenedor para mover la pasta en éste.

Justin miró en su dirección, sonriéndole inocentemente, a pesar de que detrás de una sonrisa había unos mensajes subliminales que solo ellos entendían. Y Kyle...

—Oh, ¿recuerdas lo que te dije el otro día?—Kyle lo miró, bebiendo de su vaso de agua.—Bueno, resulta, que la chica con la que está durmiendo el hombre, es prácticamente una niña.—Jadeó, fingiendo que era impactante. Kyle quería ver la reacción del hombre que tenía enfrente.

Levantando las cejas, Justin rodeó a Samantha.—Mierda, ¿en serio?

—Dieciséis años, para ser precisos.—Comentó.—¿Puedes creerlo?

—Bueno, ya que no me dijiste la edad del hombre supongo que es más viejo.—Justin se encogió de hombros, toda la mesa, aparentemente tenía interés en el tema de conversación.

Kyle miró alrededor de la mesa, con una sonrisa de suficiencia tirando de la comisura de los labios.—Tiene veintidós.— Pronunció con facilidad.

—Espera, eso es como una diferencia de...siete años.—Comentó Samantha con el ceño fruncido en su rostro.—¿No es prácticamente ilegal?—Preguntó, era evidente por la expresión en su cara que estaba disgustada.