Levi la fulminó con la mirada, al instante siguió sacándose su camisa y tomó la remera del uniforme. Gruñó levemente y siguió vistiéndose sumergido en sus pensamientos esperando a la llegada de sus demás reclutas.

-¡No sé a qué se refiere, Hanji-san! –se escuchó el grito nervioso de Petra desde el pasillo seguido de una fuerte risa de la castaña.

Su teléfono comenzó a sonar por lo que Levi llevó su mano hasta su chaqueta y lo sacó para luego contestar la llamada con cierta sorpresa.

-¡Aniki! ¿No llegaras a cenar?

-Isabel, no sabía que estarían en mi departamento esperándome... de nuevo.

Ella bufó.

-¿Acaso te molesta, baka-aniki?

-No, sabes que no, Isabel –indico sentándose en la banqueta- Surgió un problema, tengo que salir ahora con mi equipo. No me esperen.

-¡Noo! ¡Que mierda que...!

-¡Esa boca! –gritó Farlan sonando molesto.

Isabel rio levemente.

-Lo siento, lo siento –contesto sonando una niña pequeña luego de que acababan de sermonearla- En fin, Aniki, la cena de hoy era muy importante.

Levi se quedó en silencio esperando escuchar lo que sucedía. Sabía que no era el cumpleaños de Isabel, ni de su amigo, como tampoco era su aniversario o sucedía algo fuera de lo común.

Él frunció el ceño al caer en cuenta que Isabel iba a comenzar a maldecir, eso ella lo hacía en pocas ocasiones tales como cuando se enojaba o las cosas no salían como esperaba.

-¿Entonces, Isabel? –cuestionó con su voz fría- Dime porque tengo que salir en unos minutos –explico cuando notó como por la puerta del vestidor entraban Gunther, Erd y Auruo que lo saludaron con un gesto con la cabeza.

-Veras, Aniki. No quiero que mueras en soledad, además espero sobrinos, por lo que te he programado una cita, ¡Será divertido! ¡Mañana es, yo me encargo de todo con Farlan! ¡De hecho fue su idea!

-¿Qué? –gruñó en un tono elevado mientras se sobaba el entrecejo queriendo reprimir sus ansias de asesinato- creí que todo eso había quedado descartado.

-No, que seas un desastre coqueteando no quiere decir que me rinda.

Levi apretó los puños con fuerza a la vez que comenzaba a ajustar su calzado buscando terminar de vestirse de una buena vez.

-No iré.

-Sera en tu casa, baka-aniki.

-No quiero eso, Isabel, suspende todo esa mierda.

-¡Esa boca! –gruñó Farlan sonando molesto por escucharlo decir una grosería.

Levi cerró los ojos y respiro con lentitud.

-Es una noche complicada, prefiero hablarlo mañana y...

Isabel grito.

-¡Oh, vamos! ¡Al fin te conseguí una cita con mi prima y tú quieres posponerlo! ¡Eso sí que no! ¡No es justo! Ella te encantara, Aniki, en serio. No la he arrastrado hasta aquí para que...

-Tengo que colgar, mañana hablamos –explico seriamente mientras se ponía de pie y colgaba la llamada.

El azabache les dedico un saludo a sus subordinados y luego salió del vestidor para dirigirse hasta la oficina de Erwin. Una vez que cerró la puerta, generando que el ruido resuene en las paredes, emprendió aquel camino que conocía de memoria a través del pasillo.

Sombras del pasado [Rivetra]Where stories live. Discover now