Justo enfrente estaba un chico rubio y algo bronceado sonriendo. Llevaba un bañador rojo y sonrió como un niño al verme.

—¡Brook! —exclamó mientras corría hacia nosotros. Cuando llegó hasta mí me cogió en brazos y me dio vueltas por los aires.

¿Por qué? Simplemente. ¿Por qué tanta emoción al conocerme? ¿Por qué tienen que tomarse estas confianzas cuando yo casi no recuerdo sus nombres? ¿Por qué puede conmigo si es prácticamente de mi altura y yo no soy capaz de levantar una pesa de cuatro kilos? Pero sobre todo:

—¿Era necesario abrazarme estando mojado? —pregunté riendo. Cam debería valorar mi esfuerzo por ser amable, porque podría haberlo dicho borde y el chico se hubiese apartado mirándome mal.

Al fin me bajó y al dejarme en el suelo me di cuenta de que no éramos iguales. Él me llevaba unos centímetros, pero no muchos.

—Por supuesto, así recordarás siempre cómo nos conocimos. —oh, no creo que se me olvide. Ni a mi camiseta la cual acabas de empapar. Ni a Cam, el cual se está descojonando en silencio de mi cara.— Soy Jack —dijo con una gran sonrisa.

—Brook. —dije obvia y se rió con ganas. ¿Por qué se ríe si no soy graciosa? Se está riendo de mí, lo pillo.

Un chico muy moreno en el que no había reparado hasta entonces caminó hasta nosotros.

—Bienvenida, Brook. Soy Jack Gilinsky. —me dio un beso en la mejilla y me observó de arriba a abajo. Este me había saludado como una persona normal, pero la palabra discreción no debía estar en su vocabulario.— Cam, no mencionaste que fuera tan guapa.

—Atrás, baboso. Cada vez que Madison está lejos estás más salido que un perro sin castrar. —le respondió Jack. Jack Johnson.

Repetí su nombre en mi cabeza con la intención de acordarme más tarde.

El chico rubio natural -Gilinsky tenía el pelo rubio platino y con raíces- volvió a sonreír mientras caminaba a unos sofás que había a un lado de la piscina.

—¿Por qué está tan contesto? —pregunté mirándole desconfiada. Mi primer pensamiento fue suponer que estaba fumado, pero sus ojos estaban normales.

—Acaba de ganar cien dólares. —respondió su tocayo encongiéndose de hombros.

—¿Por qué? —preguntamos Cam y yo a la vez.

—Aposté con él que no existías. —Cam puso cara de ofendido, pero yo me reí, así que se le pasó.— A mí no me hace tanta gracia. —su cara no decía lo mismo, ya que estaba sonriendo.

—Nadie te mandó apostar. —respondí mientras me sentaba al lado de Johnson.

—Exacto, Gilinsky, nadie te mandó apostar. Pero lo hiciste, así que mueve ese feo culo que tienes para traer mis cien pavos. Y tú. —me señaló.— Pide lo que quieras, yo invito. Gracias por existir, por cierto.

No pude evitar reírme. No me hacía falta preguntarlo, él era el que rapeaba. Hablaba muy rápido. Me caía bien, era alegre y amable.

—Me conformo con unas palomitas. O chocolate, no sé, lo que más tengáis. —dije tímida. Si Cam me hubiese dicho eso le diría que me llevase a una marisquería y comiésemos hasta que nos doliese el dedo gordo.

—Qué bien me caes, Brook.

Los tres nos reímos. En ese momento apareció el otro Jack con un billete de cien en la mano. Se lo tendió a su amigo con una mueca, y el otro no recibió con una gran sonrisa. Me recordaron a nosotros. Cam y yo nos pasamos la vida apostando cosas.

Durante un buen rato ambos me estuvieron sometiendo a un tercer grado mientras Cam no hacía nada por ayudarme. Sólo reía ante mis caras. ¿Es que a quién se le ocurre preguntarme si alguna vez Cam y yo pasamos a mayores?

—Nosotros también teníamos una mejor amiga. —dijo Gilinsky triste de un momento para otro.

—¿Qué pasó? —pregunté con tacto. Me sorprendí a mí misma, ya que tengo la capacidad emocional de un ladrillo. Algo así como Ron.

—Bueno, a ella no le gustaba nada todo esto de la fama, así que nos acabamos distanciando. —explicó Jack Johnson.

Eso me dio que pensar. Si pasase algo que me diese a conocer nunca me alejaría de Cam. No podría. Con los años se ha convertido en una pieza clave de mi vida. En un indispensable. Estuviésemos más cerca o más lejos no podría dejar de hablar con él porque sí.

Lo quiera o no, Cam siempre va estar en mi vida. Pase lo que pase.

CASI HEMOS LLEGADO A LAS 10 000 LEÍDAS SOIS INCREÍBLES Y OS REQUETEAMOS 😍

Para las que leísteis el aviso de Wedics, esto ya cuenta como Agosto, que conste jajajajaja

Un besazo Koalas 💞

Fame » Old Magcon BoysWhere stories live. Discover now