PLEASE SAVE ME TONIGHT

CAPÍTULO 5

"Aun tienes mucho que aprender" No pensé que decir esas simples palabras y luego salir de la habitación dejándolo manchado con mi esencia fuese tan difícil, maldita sea no puedo, no sé cómo fui capaz de salir de aquella habitación sin follarlo. Su rostro, esa mirada que me daba mientras mantenía mi pene dentro de su boca, era tan malditamente caliente que no sé cómo pude aguantarme.

Es tu premio, ¿por qué te detuviste?

– Porque no soy un maldito hijo de puta...- Nuevamente mi conciencia burlándose de mí. Cerré mis ojos y por fin di el agua helada, necesitaba despejar mi mente, mojé mi rostro mientras lavaba mi cuerpo, guie mis manos a mi parte baja la cual continuaba excitada, con mis dedos la acaricie suavemente.

– Joder...- Cerré mis ojos disfrutando de las sensaciones que producía mi mano al moverse de abajo hacia arriba, mi pulgar acarició mi glande enviando conocidos estremecimientos a mi cuerpo.

– Uhm. - Más suspiros comenzaron a salir de mis labios, mientras mi mano aumentaba la velocidad.

– Jung...- Mis ojos se abrieron de inmediato al darme cuenta de lo que iba a decir, alejé mi mano de mi erección como si quemase, su rostro aún seguía en mis recuerdos. Maldije infinidad de veces mientras salía de la ducha, sequé mi cuerpo para finalmente comenzar a vestirme. Mi excitación seguía presente y dolía como el infierno, pero, no me tocaría, no pensaba masturbarme y menos pensando en ese maldito mocoso.

Me recosté en la cama, cerré los ojos tratando de dormir, gruñí desconforme al no poder dormir. En mi cabeza seguía rememorando sus labios alrededor de mi pene, mi cuerpo seguía hirviendo, su rostro seguía en mi cabeza, sus mejillas sonrojadas mientras se movía sobre mi miembro.

Cómo ahuecaba sus mejillas succionando con suavidad, su lengua recorriendo cada parte de mi miembro.

– Agh...- Sin darme cuenta ya me encontraba acariciando mi miembro mientras mantenía los ojos cerrados y seguía reviviendo todo lo vivido.

– Joder... - Me hubiese corrido con solo mirarle, su rostro se veía tan perfecto con mi pene en sus labios.

– Jodido infierno...- Comencé a aumentar la velocidad de mis movimientos, imaginando que era su cabeza la que movía a mi antojo, con mis dedos acaricie mi glande pensando que era su pequeña lengua la que la acariciaba, volví a aumentar la velocidad de mis movimientos.

– ¡Ah! - Un fuerte jadeo salió de mis labios y mi esencia comenzó a salir, me corrí... me corrí pensando en ese maldito mocoso. Posé mi mano limpia sobre mis ojos masajeándolos, intentando calmar mi respiración.

– Estoy jodido. - Susurré limpiando mi cuerpo y por fin pude dormir...

✝✝✝

Al despertarme me levanté de inmediato caminando a la ducha nuevamente con agua helada, enserio esto se estaba burlando de mí, gruñí mientras observaba mi erección. No lo volvería hacer, no volvería a masturbarme y menos por ese mocoso, antes de hacerlo lo follo y así por fin me quito las ganas, pero, hasta entonces no.

Al salir de la ducha sequé mi cuerpo para luego comenzar a vestirme y por fin bajar a desayunar, al ingresar a la cocina me encontré con Danbi quien al verme me sonrió, correspondí su sonrisa para luego sentarme. Ella continuó preparando algo para comer, su cuerpo se veía tenso y su mirada se paseaba por mí para luego apartarla. Suspiré, algunas cosas nunca cambian, desde que era adolescente ella siempre hacia eso cuando quería preguntarme algo.

– ¿Qué es lo que quieres saber? - Dio un pequeño salto al escuchar mis palabras, me miró fijamente para luego negar con su cabeza.

– Sabes que puedes preguntar lo que sea. – Mis palabras fueron lo suficientemente importantes para que ella por fin se relajase.