Annelisse

Capítulo ·5 ·El regalo·

Ella solo exhaló y después de unos segundos, le contó a Noel lo ocurrido la tarde anterior con aquella extraña confusión y el inusual regalo que tenía como destinatario a la chica desaparecida. Él, después de unas muecas y como cualquier persona hubiese hecho, no le quedó nada más que preguntar:

—Y ¿qué tenía dentro?

—No lo sé.

—¿Cómo que no lo sabes? —Se alteró él. —Pero ¿dónde está? —dijo levantándose.

—Justo detrás de ti, en la mochila.

Él se volteó emocionado a buscar aquella sorpresa.

—Parece algo extraño, Vic, por que... —Su relato se vio interrumpido cuando desenvolvió una caja vieja, empolvada y muy bien cerrada.

Los chicos empezaron a abrirla con mucho cuidado para evitar romper cualquier cosa que llevase por dentro. Después de un delicado trabajo, los chicos abrieron la caja para llevarse la sorpresa que dentro se encontraba un calendario del año 1997 con una fecha marcada, además de un periódico antiguo del mismo año y un mapa hecho a mano de un lugar que los chicos no podían descifrar.

—¿Sabes qué es todo esto? —Preguntó ansiosa, mientras se levantaba de la orilla de la cama para observar con detalle.

—No tengo ni idea. —decía extrañado.

Victoria tomó el periódico y a simple vista no tenía nada extraño, lo abrió y revisó cada una de las hojas, pero no había pista alguna. Ella pensaba que tal vez había algún mensaje encriptado, pero estaba totalmente limpio. Lo mismo hizo con el calendario, revisaron cada página pero este, a diferencia del periódico, sí tenía una fecha señalada: 27 de marzo del 97. La marca estaba hecha con pilot y remarcada con insistencia.

—¿Qué demonios es esto? ¿Por qué alguien le enviaría esto a esa niña? —Ella no despegaba sus ojos del plano, pero no podía descifrar de cuál lugar era.

—Bueno, sabes que esa señora es vieja, ha de ser que está jugando contigo.

—Podría ser cierto, pero ella insistió bastante en que era para ella, esa mujer no está en todas sus facultades, no creo que pueda inventarse algo como eso.

Noel tomó el mapa, el cual estaba muy arrugado y sucio, intentó limpiarlo y notó cómo la contraparte de la hoja traía un extraño dibujo.

—Es que son solo garabatos, dudaba mientras le daba vuelta una y otra vez al papel.

El teléfono de Noel sonó, era su madre quien le pedía que regresara a casa antes de las 9 pm; él se resistió, por lo que iniciaron una acalorada discusión. Victoria no conocía mucho a la madre de Noel, pero sabía que no tenían una buena relación. Ella sin querer escuchó la conversación ya que ella le gritaba tan fuerte que su voz salía del teléfono.

–Explícame dónde estás Noel. –decía furiosa.

–En casa de Victoria, mamá.

–¿Es esa tu nueva casa o qué? Eres tan irresponsable, tus hermanas llevan horas solas, no han comido y no haces otra cosa más que perder el tiempo con esa buena para nada.

–¿Cuándo vas a entender que esa no es mi responsabilidad?

–Ah ¿no? Y entonces ¿de quién es? Tu padre y yo trabajamos todo el día para que puedan tener todo.

–Ese bueno para nada no es mi padre –dijo el chico alterado.

–¡No lo llames así! El bueno para nada aquí eres tú. Hazme el favor y te devuelves a la casa ya o te largas, estoy cansada de ti, solo sirves para estorbar Noel, haznos un favor y vete.