Las Venganzas De Sophia Loren

Preparaciones

Era una noche obscura y fría. El aire nocturno entra por la ventana entreabierta refrescando el cuarto ligeramente. Mi cabello negro rizado cuelga libremente. El vestido se aferra a mi busto y es ampon bajo la cintura. Es color rojo obscuro y con un escote de corazón con encaje negros en la orilla, no demasiado profundo. El corsé me aprieta bajo el vestido pero no demasiado solo lo suficiente para acentuar mi cintura y busto. De mi cuello cuelga el dije de estrella que era de mi madre y he llevado siempre desde su muerte. Voy hacia el tocador y tomo el labial rojo del cajón. Me lo pongo cuidadosamente en los labios procurando no mancharme. Me pongo rímel y pellizco mis mejillas para darles rubor. Noto un brillo en mis ojos grises poco comunes que no se como interpretar. Tomo mi botella de perfume y lo huelo. Huele a mi madre y a mi, huele a noche, huele a soledad. Me pongo un poco. Veo mi reflejo en el espejo y me cuesta acostumbrarme a lo que veo. Mi rostro pálido ovalado que jamas llegue a apreciar hoy se veía diferente, con mas vida. Irónico pensando en lo que debía hacer esta noche. Saco una caja de madera debajo de mi cama, la abro y saco mi máscara. Es negra y en forma de mariposa, es simplemente hermosa. Me la pongo y noto que cubre la parte superior de mi rostro solo dejando ver mis enormes ojos grises y mis labios rojos como la sangre. Tomo mi abrigo y mis guantes negros de seda y con encaje y me los pongo. Llegan a mis codos. Pienso en cuanto habrá gastado Julio en todo esto, la ropa,los zapatos, las armas, hasta el maquillaje me lo había proporcionado el. Me acerco a mi buró y saco la pistola y daga. La daga en si era una obra de arte, confeccionada a mano y con hermosos detalles en el mango. La oculto en mi vestido junto con la pistola. Me dirigió hacia la puerta y suspiro antes de salir y cerrar la puerta atrás de mi. Esta sera una larga noche.