Tear in my heart || Josh Dun

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¿Cómo se supone que debemos enfrentar la vida? Lo sé es una pregunta un tanto inesperada, pero sinceramente, no sé cómo se supone que debe ser la vida en sí, en estos momentos me encuentro muy confundida, todos los pensamientos que hay en mi cabeza son borrosos y por más que intento no puedo encontrarle ni pies ni cabeza. Es algo tan difícil de explicar para mí. Pero... no tengo idea de si alguna vez les ha pasado este tipo de cosas. Es sólo que siento que ahora que mi vida va bastante bien en muchos sentidos, mi pasado vuelve y vuelve a hacerme caer. Lalie Stone, es la clásica chica hermosa que rompe corazones con cada paso que da, y ha venido hasta acá a romper nuevamente mi corazón. Resulta que ella está hablando muy cariñosamente con Josh. Creo que a ella no le bastó con quitarme a mi prometido, ahora viene y mi quita mi... Josh. 

Mejor, les platicaré lo que sucedió un día antes, empezaré por ahí para explicar cómo es que llegamos a esta situación. 

—Jenna ¿estás segura? —le pregunté a la rubia que estaba parada frente al espejo de cuerpo completo que había en mi habitación, lucía hermosa en un bello vestido amoldado a su esbelto y deportivo cuerpo. 

—Claro que sí. Tú misma lo has dicho, tenemos que dejarnos de tonterías, somos adultos y actuaremos como tal —respondió segura de sí misma —. Ahora ¿cuáles son las palabras que te repites cada mañana? —al parecer su seguridad no duró mucho, pues dejó ver su nerviosismo. 

—Eres linda, inteligente, fuerte e importante —fue el turno de mi amiga repetir esas palabras a su propio reflejo en el espejo. 

Miré a Jenna, estaba dispuesta a arreglar las cosas con Tyler, no pude convencerla de ir al viaje, pero al menos pude convencerla de hablar con él. Ya es algo. Algo que todos tenemos muy claro, es el inmenso amor que Jenna y Tyler se tienen y sería una verdadera estúpidez que abandonaran esa relación casi perfecta que llevan por un mal entendido. 

—Estoy lista, podemos irnos, Shannie —habló mientras tomaba una gran respiración. 

La cogí de la mano y ambas salimos de mi casa con dirección al lugar donde Tyler dijo que estaría, no era un restaurante lujoso, de hecho, ni siquiera era un restaurante, era la azotea de un edificio, cuando llegamos a éste, ambas lo miramos de arriba abajo, Jenna, apretó mi mano. 

—¿Te has arrepentido? —pregunté un poco temerosa.

—No, es sólo que... es sólo que aquí fue nuestra primera cita —Las lágrimas parecían querer salir de sus ojos, pero ella no las dejó, sólo acomodo su abrigo y su cabello —. Es hora —caminó hasta la entrada del lugar conmigo a sus espaldas, subimos por el elevador hasta el último piso y de ahí tomamos las escaleras para salir a la azotea.

Cuando abrimos la gran puerta negra, vimos una escena sumamente preciosa, había una mesa redonda en medio del lugar con un mantel blanco, un ramo de flores en un florero y velas por todo el lugar, había también tiras de luces, probablemente navideñas, adornando el ambiente. Él realmente se ha esforzado. Tyler lucía incluso más nervioso que Jenna, él iba vestido con una camisola blanca y un par de sknnies jeans negros. 

—Shannie —me llamó la rubia, volteé a verla y me tomó por ambas manos, mientras me miraba fijamente musitó: —gracias, por ser una verdadera amiga, de verdad, gracias por todo. 

—No tienes que decir nada. 

La dejé ir para que pudiera reunirse con su cita. 

—Creo que me dará un coma diabético, es demasiado romanticismo para mí —la voz de Josh se hizo presente, el señorito, estaba parado a mi lado mirando la escena al igual que yo. 

—Cállate, Josh. Que tú eres más cursi que ellos —reí y él me golpeó levemente el hombro.

—Salgamos de aquí, pequeña y linda pelirroja —colocó su mano frente a nosotros para que yo la tomara.