¿La guerra se desvanece?

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-Bueno los dejo solos, eso es todo señor Renaldy.-había dicho el hombre de bata blanca, Jellal solo asintió y este abandono el cuarto, todo quedo en silencio a excepción de la máquina que sonaba midiendo mis latidos de corazón, apreté las sabanas, acaso y si él ya...

-¿Por qué no me dijiste nada?-Jellal había empezado hablar, su cara se topó con la mía y lo pude notar, una gran tristeza, se me hizo un nudo en la garganta-¿Por qué no me dijiste que estabas embarazada?-

Y ahí todo empezó, las lágrimas salieron por si solas, no sabía que decir y solo empecé hablar como su la vida se me fuera en ello.

-Yo tenía miedo...estaba preocupada...-respondió limpiando mis lágrimas, Jellal se sentó a mi lado.

-Ese niño era de él, de Natsu Dragneel.-

Yo solo asentí, él no dijo nada más...

-Yo... solo quería encontrar el momento adecuado para decírtelo, pero...no sabía cómo, tenía miedo de...-

-¿Qué te obligará a abortar?- respondió este, yo lo miro y una sonrisa triste salió de sus labios-Me crees tan monstruoso para pedirte eso.-

-No es eso.- me apresuré a contestar, pero al moverme el dolor volvió, Jellal me sujeto de los hombros y me obligo a recostarme.

-Descansa lo que sucedió fue delicado.-me dijo, su sonrisa tierna, esa sonrisa tan habitual volvió-No te hubiera obligado Lucy, era un bebé, una inocente criatura que no tenía la culpa de lo que hizo su padre...-¿Su padre? Pero Natsu no era el asesino de mis padres...espera ¿El bebé? Por qué lo había dicho en pasado.

-Jellal que le paso a mi bebé.- fue la primera vez que lo llame así, él se entristeció al instante, me incorporé ignorando el dolor y lo sujete de la camisa-¿Qué le paso a mi bebé?-

-¿Cómo quieres que me tranquilice? ¿Qué le paso a mi bebé?-pregunte desesperada, Jellal me tomó de los hombros.

-El bebé ya no está con nosotros Lucy.-sus palabras fueron como espadas atravesando mi corazón, me quede en blanco al oírlo decir eso-Lo siento...- fue lo último que dijo, yo lo solté y mis lágrimas de nuevo salieron, un vació me dominó y sentí que el mundo se me venía encima.

-No es cierto... no lo es...- fue lo último que dije al caer inconsciente en la cama~)

Natsu se seguía abrazando a Lucy, está ya no lloraba pero el dolor seguía ahí.

-Unos días más tarde me enteré...que había sido una aborto natural, al parecer el embarazo era considerado de alto riesgo, ya que la bolsa estaba desprendida un poco de la matriz y por ello...yo lo perdí, por mi descuido.- susurro, abrió los ojos y miró a Natsu-Perdón Natsu perdí a nuestro bebé...-

  Natsu la tomo de las mejillas y deposito un suave beso en los labios de la chica, esta lo miró en el momento que él le sonrió con ternura.  

-No fue tú culpa cara de ángel, estás cosas pasan, además no podías saber que el bebé venía mal.- susurro este acariciando su mejilla-No pidas perdón Lucy, porque yo no tengo nada que perdonarte, en cambió.- este unió su frente con la de ella-Gracias por haberme dado un hijo y no haberlo rechazado.-

-Natsu.-

-Te amo... y aun así, cara de ángel...- Natsu sonrió-Lo podemos intentar de nuevo, tener un bebé, ya que espero que esta vez no te vayas de mi lado.-

Lucy sonrió y una lágrima bajo por su mejilla-Te amo Natsu.-

-Y yo a ti.-

Los dos se consumieron en un nuevo beso, tratando de borrar toda la tristeza que en esos años los habían azotado, tratando de impregnarse nuevamente con la fragancia del otro, y sin preguntarse qué les depararía el destino ahora, solo por esa noche se dejaron llevar como nunca antes lo habían hecho, esa noche los dos compensaron los besos y caricias pérdidas durante esos tres años y la promesa de seguir juntos por siempre.

Solo soy Lucy y Él solo es Natsu [[Editando]]Where stories live. Discover now