Idol's Love: Second Melody [pausada]

Capítulo especial: Masato x Tokiya (parte 3)

Aquella noche ni Masato ni Tokiya podían quitarse de la cabeza el uno del otro. 

Masato estaba completamente convencido de que conseguiría hacer sonreír a Tokiya.

Mientras tanto a Tokiya le daba curiosidad el cómo.

Los días pasaban y las miradas en los pasillos habían aumentado. Ya no solo eso, si no que por la noche se escapaban para verse. 

Por el día estaban demasiado ocupados como para divertirse, tenían muchas clases y trabajos. Sus rostros eran graciosos por la mañana, muertos de sueño pero un poco más felices que el día anterior. 

Un día, Masato y Tokiya estaban sentado sobre el césped de uno de los prados, uno enfrente del otro. Masato estiraba de las mejillas del contrario intentándole hacerle sonreír aunque fuese a la fuerza.

-Me haces daño -dijo Tokiya poniendo los ojos en blanco.

Masato le soltó, suspirando.

-No pienso rendirme -dijo alzando el rostro.

Tokiya sacudió la cabeza.

-Pierdes el tiempo.

-¡No eres un robot! -seguía convencido Masato-. Tienes sentimientos, igual que el resto de personas, solo que están muy escondidos.

-Pero ni tú ni nadie puede sacarlos -continuó Tokiya alzando una ceja.

Todos esos días Masato había estado intentando pensar en cómo hacerle sonreír. Le había contado chistes y hasta había puesto muecas vergonzosas para que diese al menos una pequeña carcajada. Pero el rostro de Tokiya parecía que estaba petrificado.

Masato seguía pensando, pero no se le ocurría nada.

De pronto se dio la vuelta y dejó caer su cuerpo sobre el de Tokiya, el cual con un respingo también se cayó hacia atrás. Ahora Masato estaba tumbado sobre él, su cabeza apoyada en su pecho. Giró el rostro. Ahora podía escuchar los latidos del corazón de Tokiya. Cerró los ojos. Bum bum, bum bum. Eran como una melodía.

-Eres humano Tokiya, puedo oír tu corazón.

Tokiya seguía contemplando el cielo, en silencio.

-¿Y cómo suena?

Masato volvió a cerrar los ojos y continuó escuchando.

-Ahora el mundo está cambiando. La primera canción se alza en el viento. -cantó Masato. Abrió los ojos-. Esa es tu canción.

Tokiya quedó enmudecido.

-Cantas muy bien.

-Es que tu corazón suena muy bien.

Masato escuchó un sonido, como una suave risa. Se apoyó sobre su codo y se incorporó, sorprendido. Tokiya se tapaba la boca con una mano.

-¿Estabas riendo?

-Solo un poco... -Tokiya apartó la mano, ahora ya serio.

-¡Pero estabas riendo! -dijo feliz Masato-. ¡Eso es sonreír!

-Es que has dicho algo muy estúpido -Tokiya se mordía el labio inferior.

-¿Ves? Sabía que no eras un robot -dijo Masato sonriendo esta vez él.

-También dudaba en que lo fueras tú, ¿tampoco sonríes mucho sabes?

Masato volvió a ponerse serio y se sonrojó.

-Ah... Bueno... Es que es mi personalidad -volvió a apoyar el rostro en su pecho para evitar que Tokiya lo viese.