Suzuka

1K 71 49
                                    


A ti. A tu sonrisa eterna.
#ForeverJules

Y llegamos a Japón. Y yo sólo hacía contar los días, semanas y meses para que acabase este calvario.

- Ya no queda nada... - Me decía Jorge una y otra vez. Habíamos quedado en mi habitación para hacer un Skype con Blanca.

Preparé el ordenador y nos sentamos los dos en la cama. Vimos que Blanca se conectó tan puntual como siempre e iniciamos el chat.

- ¡Oh! Dios... ¡una ballena! - le dijo Jorge muerto de risa cuando vimos su imagen en la pantalla.

- Mira Jorgito, no me hace nada de gracia. Hace días que Guille debería haber nacido y ya no puedo más... ¡os lo juro!

- Es que debe de estar muy a gusto ahí dentro - le dije sonriendo.

- Ay Diana... eso parece. Pero su madre ya no aguanta más. El doctor me ha dicho que si no nace de aquí al miércoles me tienen que provocar el parto.

- ¡Guille! Tito Jorge te está llamando ¡sal ya de ahí! ¡o tu madre va a explotar! - gritó Jorge.

Los tres nos reímos...

- ¿Qué tal todo chicos? Contadme cositas, que echo de menos nuestros ratitos de charla...

Le pusimos al día de toda las novedades tanto profesionales como amorosas. Jorge incluso le contó algunas posturas nuevas que estaba probando.

- Es cierto que luego te duele un poco los brazos del esfuerzo, pero merece la pena... - contaba con toda la naturalidad del mundo.

- ¿Pero eso se puede hacer? ¿en serio me lo dices? - Blanca no salía de su asombro - Madre mía Jorge... Y madre mía con Hulk... - dijo acariciándose la tripa - Bueno, Diana, ¿Y tú cómo lo llevas?

- Pues ahí voy... tengo mis momentos. Pero dentro de lo que cabe bien. Lo que pasa que Fer se ha propuesto hacerme la vida imposible en estas últimas carreras...

- ¡Diana! ¡Mis guantes! ¡Diana! ¡Mi casco! ¡Diana! ¡Sacamela que voy a mear! - Jorge imitaba a Fer, incluso se puso unas gafas de sol para hacerlo más creíble.

Blanca no paraba de reír aguantándose su enorme barriga.

- Es que no puedo contigo Jorge... - le decía a mi amigo. - ¿Así está?

- Más o menos... - le dije a Blanca - sé que lo hace para fastidiarme. Pero intento no hacerle mucho caso y llevarlo lo mejor que puedo. Ayer en los libres, por ejemplo, me tuvo casi toda la mañana sacándole brillo al casco porque, según él, no estaba perfecto. Y hoy en la clasificación he tenido que ir por varios repuestos de guantes porque todos le molestaban...

- Fer no es así...

- Lo sé Blanca, es su forma de castigarme por no salirse con la suya. Me lo tomo con filosofía...

- Yo lo hubiera mandado a la mierda ya... ¡y varias veces! - dijo Jorge.

Blanca palideció de repente... Abrió mucho los ojos y se llevó las manos a la boca...

- ¿Estás bien Blanca? - le dije.

- Creo que he roto aguas - dijo con un hilo de voz. - Eso... o me acabo de hacer pis encima...

- ¡Qué viene Guille! - dijo Jorge dando palmitas.

- Os dejo chicos.

- Sí, Blanca. ¡Ánimo! Todo va a ir bien. Estamos deseando de conocer a Guille. Muchos besos... - le dije emocionada.

El corazón en Boxes (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora