El Lado Perfecto [KaiSoo/KaDi]

UN RESPIRO

—KyungSoo...—su voz probablemente era lo único que necesitaba ahora para poder tranquilizarme aunque sea un poco.

Suspiré mientras cerraba los ojos de cansancio, esto no iba a funcionar...no estaba haciendo que funcionara. Me levanté de la mesa y cogí mi mochila, podía escuchar los pasos silenciosos de JongIn de tras de los míos; por su parte, mi padre ya se había marchado al trabajo.

—KyungSoo—insistió tomándome del brazo, me giré para mirarlo con el ceño fruncido y deshizo su agarre de inmediato.

—Escucha JongIn, no iré contigo a la escuela, no vas a obligarme...no lo haré—gruñí más que molesto, estaba seguro que podía golpearlo si se atrevía a tocarme de nuevo.

—Cállate y coopera—ordenó—No seas estúpido y reflexiona, tu padre es una buena persona...se preocupa por ti y tu...—suspiró alejándose unos pasos de mí, luego me dedicó una mirada que bien podía perforar mi alma.

—Estoy siendo malagradecido, lo sé—agregué ya más tranquilo—Lo siento, por lo que presenciaste antes.

—Reflexionaste muy rápido, así que ya vámonos que se hace tarde—sonrió para consolarme, lamentablemente no pude devolverle el gesto, aunque he de admitir que me gustó mucho que lo hiciera por mí.

Subí a su Mustang y ambos nos marchamos escuchando música muy tranquila, no pensé en tener una conversación con él durante el camino pero...

—Tengo una estrategia—dije de repente y JongIn me miró interrogante—Es porque...supongo que nos verán llegar juntos y eso.

— ¿Qué tiene eso de malo?—volvió su vista al frente, parecía molesto.

— ¿Qué tiene de malo?—repetí—Que...no me gusta ser un tema de conversación, suficiente tengo con que todos se darán cuenta de mi regreso—fruncí el ceño—Lo que quiero decir es que...

—De acuerdo, no quieres ser el centro de atención por llegar a la escuela con el grandísimo Kim JongIn—bufé ante su intento de chiste.

—Bien, más o menos entendiste mi punto. Así que tengo una idea—me acomodé para poder mirarlo.

— ¿Cuál es?—dijo sonriendo, «maldito, no lo hagas eso» pensé.

—Mmmm si te preguntan cualquier cosa sobre éste...—nos señalé a ambos—...tema, tendrás que responder «Pregúntale a KyungSoo» y yo diré que te pregunten a ti ¿de acuerdo? —ahora soltó una carcajada y eso me molesto. — ¿Cuál es tu problema?—lo golpee en el brazo y él se quejó sobándolo con el otro—¡Las manos al volante!—regañé—¿Quieres matarnos idiota?

—No, lo siento—respondió—Pero, esa idea tuya...me parece algo muy simple—me miró esta vez—Eres tan raro...

—Funcionará y más te vale que sigas mi plan o no me importaría venir en transporte público a la escuela a partir de mañana.

Por el momento eso me bastó para tranquilizar el caos dentro de mi cabeza, era difícil reconocerlo pero JongIn era la mejor compañía que podía tener en esos momentos.

Y como supuse, todos nos observaron, quería asesinar a cualquiera que se atreviera a mirarnos, pero...debía controlarme.

—Vamos KyungSoo, es álgebra a la primera—habló el moreno ignorando por completo el caos que estábamos causando—KyungSoo—insistió. Suspiré cerrando la puerta del auto y lo seguí perezosamente.

El profesor me dio nuevamente la bienvenida, pero esta vez mi asiento ya no estaba al lado de ChanYeol, sino de alguien más que no recuerdo su nombre. BaekHyun se veía muy feliz de verme y le dediqué una leve sonrisa; Sehun me miraba insistentemente, pero buscaba a toda costa mantener mis ojos sobre la pizarra o mi libreta, esto iba a ser difícil.