No lo olvidaré

23 2 0
                                    

04 / 06 / 2016

8:27 p.m.

Nunca olvidaré éste día.

El Sol ha caído y sólo quedan en el cielo aquéllos colores hermosos que siempre tranquilizan y mi compañía es el perro que a todos lados me ha seguido como a un fiel amigo.
N

o cabe duda de que uno se va quedando solo cuando descubres la mediocridad en que los amigos se sometieron y no quisiste formar parte de ello. Uno cree que se pierden los motivos pero los hay a pesar de todo. Hoy es el día en el que descubrí que la felicidad reviste a unos y despoja a otros... No obstante, el día se va y te deja en los brazos obscuros de la noche; ésta al inicio se muestra insuperable, pero conforme se adentra en ella la va uno amansando cuál animal primero empieza hostil y luego amigo.
La Luna se va, pero no porque se haya ido significa que no valla a volver, se va porque necesita irse, sólo hay que esperar de ella su retorno para alimentarnos de su luz y de insignificancia.
El amor también se va, no por gusto si no por incomodidades, pero no quiere decir que éste no vuelva, pues puede volver en una flor o en una tempestad.
Las amistades se van por placer, por vanidad, por arrogancia... Son individuos que sólo buscan algo que a veces no tenemos.
Entonces se queda la soledad y el silencio, por un momento mientras la mente está turbia, dolerá y buscará respuestas a preguntas que no merecen ser mencionadas... Quien se va, que se valla por voluntad si ya pensó en irse, y si regresa, debe primero sentarse al otro extremo de la mesa para no estar cerca aún de quien jamás le cerró la puerta.


Hoy es el día que nunca olvidaré, por que mientras estoy con mi perro siento más la compañía de un ser que no me habla, a la de un ser que sí me habla, enferma con sus pensamientos el ambiente si sus pensamientos sólo quieren extraer y no reponer. En este momento estoy entre la luz y la oscuridad de los días, entre Sol y Luna, estoy en medio del camino, esta vez sin opciones, esta vez con uno de los regalos que Dios sabe dar.

Es la oportunidad de algo y siento miedo, nunca me imaginé de esta manera, pero ahora lo vivo.

Y con el nudo en la garganta posiblemente porque comprendí que toda idealización, les pido perdón a esos amigos en que creí que mi visión de lo perfecto era creer que jamás iban a herirme... Hoy les digo: Dios bendiga sus caminos, que el destino no sea cruel y que sea dulce, que se les otorgue una larga vida llena de dicha y abundancia, que se les dé a cada uno tanta ternura que sus corazones no lo resistan y mueran en ello. Y sobre todo, les deseo una muerte digna y dichosa, una muerte considerable y no dolorosa, una muerte llena de ofrendas y risas, llena de ternura. Que el destino no los deje solos, deseo de todo corazón... a los amigos que tanto amé les deseo la gloria y una vida larga.

Nunca Es Tarde Para Llegar A Tiempo (editando)Where stories live. Discover now