Hoy quiero escribir un pensamiento triste, el más triste que me permita desahogar con llanto todo lo que se quiere expresar. Hay dulce nostalgia en mi corazón, hay palabras que nacen en la parte media de mi pecho situado a una cuarta arriba de mi estómago que son hiel. Quiero llorar de placer, rendirme, llorar. Llora, suelta, ¿Quieres mi hombro? Perdona que no he limpiado lágrimas antiguas que se han añejado y se destilaron por mi cuerpo, hicieron sensible al tocar mi corazón. Cantemos juntos porque así es el amor; no seas egoísta y deja que yo también llore, sólo no mueras hoy, descansa del ruido ensordecedor de quién dice que no importaba el amor. Quisiera volar, irme, desaparecer en la nada o pegarme un tiro, quisiera no ver que ambos habitamos el mismo mundo y que tú indiferencia duele al igual que tus palabras. Te veo y lamento decírmelo, no hay versos tristes, no hay palabras ni pensamientos que que sean más grandes que tus palabras, pues mi dolor sigue aquí. Tengo un sentimiento que se ahoga en whisky y que se esfuma convertido en humo por un par de cigarrillos... tengo a la Luna de consuelo, porque a pesar de la inmensidad del cielo y el espacio, lo que siento por ti se vuelve pequeño.
ESTÁS LEYENDO
Nunca Es Tarde Para Llegar A Tiempo (editando)
RandomNunca es tarde para llegar a tiempo, aunque el reloj indique lo contrario. Nunca será tarde para ese café prometido, para ese abrazo escondido, para un te amo que desde tiempo se te ha adherido. Nunca será tarde para esa charla, para ese amigo, par...