Epílogo de: "¿Qué pasaría si algo fuera diferente?"

Alegría.

Estoy terminando de bañar a Willow cuando escucho varias voces provenientes de la planta baja, por lo que cuando acabo de cambiar a la niña decido bajar con ella en brazos.

-Mira, una mini descerebrada- dice Johanna apenas me ve bajando las escaleras.

Willow comienza a reír al escuchar la voz de Johanna, lo cual hace que esta finja indignación al no poder lograr su cometido.

-Por lo menos eres más risueña que tu madre- la toma en brazos lo cual hace que ría un poco más, y como Johanna no logró su cometido de hacer que Willow se quedara seria aprovechó para hacerme enojar a mí.

Y es cierto, en lo único que Willow no se parece a mí es en el carácter, ella es mucho más alegre que yo, como lo es Peeta, por lo cual creernos que tendrá su carácter.

-¿Cómo se llama este nuevo engendro del demonio?- le hace muecas a la niña para que se entretenga.

-Willow-

-Hasta su nombre es más bonito- se cuál es su intención por lo que decido ignorarla.

Annie toma a Willow de los brazos de Johanna y dice.

-Está muy pequeña, ¿Cuántos días tiene exactamente de Nacida?-

-Hoy cumple una semana, pero lo que pasa es que alguien decidió venir al mundo tres semanas antes- digo acariciando ligeramente la cabeza de Willow.

-Pero lo bueno es que está sana, eso es lo que importa-

La bebé comienza a removerse en los brazos de Annie, esperando que sea yo quien la cargue, ya que cuando lo hago se tranquiliza y se acurruca en mi pecho hasta que se queda dormida.

Vamos a la sala de estar y la mirada de Finnick jr. Se encuentra fija en Willow, no la despega en ningún momento, de hecho cuando tomo asiento se coloca a un lado mío para observarla mejor y saber qué es.

-Es una bebé- le dice su madre al ver la cara de confusión de su hijo.

-¿Por qué es tan pequeña?- pregunta curioso.

-Así son todos los bebés, pero día con día van creciendo, así estabas de pequeño cuando naciste, y mira del tamaño que estas ahora- le dice esto último en broma, a lo cual el niño entiende lo que le quieren decir.

Temeroso acerca su mano a la de Willow y esta se despierta, adormilada se le queda viendo seria mientras toma uno de los dedos de Finnick Jr. Con una de sus manitas, de pronto ella suelta una carcajada al igual que él.

Ambos siguen jugando unos minutos, a lo cual Johanna y Finnick aprovechan para molestar a Peeta diciendo que Willow ya tiene pretendiente y este se defiende diciendo que Willow aún está muy pequeña y que no la dejará tener novio hasta que cumpla los 25 años.

-Creo que eres el menos indicado para decir eso- le digo en tono de broma ya que el lleva enamorado de mí desde que teníamos 5 años.

-Lo sé, pero ya dije, será hasta que cumpla los 25 si es que bien le va- todos estallamos en carcajadas ante su comentario.

Willow nos observa atenta, ajena a todo lo que ocurre a su alrededor.

Unas horas después deciden retirarse diciendo que tienen que ir a descansar puesto que su tren sale a primera hora de la mañana.

-Por cierto esto llegó para ustedes a la estación y decidimos traérselo para aprovechar la vuelta- Dice Finnick mientras nos tiende una gran caja que estaba afuera en el pórtico.

Peeta toma la caja y la lleva a la sala de estar mientras que yo me dedico a darle pecho a Willow.

-Es de parte de Flavius, Venia y Octavia- dice y me muestra la tarjeta que muestra los datos de envío.