Sin amor a la fama (The Vamps)

Capítulo 97.

-Vete a tu casa.

Beth se encoge aún más sobre si misma mientras mira a Connor.

Su aspecto es duro, pero no tanto como el hecho de que la está echando. No quiere hablar.

La lluvia aprieta más.

Connor no deja de mirarla.

Un brillo calculador alumbra en sus ojos, como si estuviese decidiendo que hacer.

-Debería dejarte ahí, por todo el daño que me has hecho. -hace una breve pausa.- pero ese daño también me lo he hecho por ir detrás tuya. No se por qué te esfuerzas en que hablemos. No hay nada que hablar.

Beth se limpia las lágrimas.

-Porque me importas.

Connor se roza con la mano la barbilla y la mira fijamente. Ella sigue sentada, sin apartar la vista.

-No me voy a ir hasta que hablemos.

-Muy bien. Suerte.

Contó cierra la puerta.

Ha pasado una hora. Connor se asoma a la ventana y ahí la ve. Todavía sentada. Acurrucada junto a la columna.

Siente pena. Se siente mal. No puede dejarla ahí.

La dejará pasar y hablar. Pero nada volverá a ser como antes.

Coge mantas y baja. Abre la puerta.

El cuerpo de Beth tiembla con fuerza. Tiene los labios morados.

Connor la envuelve en una de las mantas con una especie de abrazo.

No dice nada. Sólo la ayuda a levantarse y la pasa a dentro.

Le seca la cara.

Beth sonríe.

-¿Por qué sonríes? No me extrañaría que hayas cogido algo. A lo mejor te está dando una hipotermia. Quítate la ropa mojada.

El chico se aleja poco a poco.

-Espera. -dice con un hilo de voz.

-¿Qué pasa?

-N-no p-uedo.

Connor suspira.

Primero le quita lo que lleva de abrigo. Le levanta los brazos para quitarle la camiseta. A continuación pasa a la mitad inferior. Beth está en ropa interior. La tapa con una manta seca.

-Quítate eso. Voy a traerte ropa seca.

Connor le da la ropa interior. Por suerte tiene la misma talla de sujetador que Inés.

La deja que de ponga ella la ropa interior y él le pone la ropa.

Un pijama de franela azul. Es de él, para que sea más grande y la cubra más.

Le seca la cabeza con la toalla y el secador.

El cuerpecito de Beth sigue temblando. Poco a poco va recuperando un color normal en la piel.

La coge en brazos y la lleva a su cuarto. Allí la tumba en la cama y la arropa.

-No entiendo como puedes sonreír.

La chica se encoge de hombros.

Connor no puede evitar sentarse a su lado y permanecer junto a ella.

-Gracias, Con. Por un momento pensé que me ibas a dejar ahí. Perdón por todo lo que te he hecho. De verdad, no sabía lo que te dolía.

-Que estés aquí no quiere decir que te vaya a perdonar.

-Soy estúpida.

-Bastante. -dice sonriendo.

Le acaricia la cabeza sin darse cuenta.

-No vuelvas a hacer algo así. Y menos cuando has firmado con una discográfica.

-¿Cómo lo...?

-James.

Beth sonríe.

Connor recibe un Whatsapp de Inés.

"Es tarde, estamos en Cádiz, pasaremos la noche y llegaremos mañana por la tarde."

Connor observa como duerme. No puede apartar la vista.

Se plantea perdonarla.

El problema es que aparecerán nuevos celos y todo será como antes. No en el buen sentido.

Pero por otra parte la ha echado mucho de menos. Se siente feliz al tenerla a su lado.

Beth abre los ojos perezosamente.

-Con, duerme conmigo, por favor. No te separes de mi lado.