Los destellos de tus ojos.

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-Gracias señor Tsukino, volveré pronto para ver a Serena.

-S-si... Cuídate Haruka. -El señor Kenji espero a que Haruka saliera de la propiedad para cerrar la puerta.

-Michiru ya pode... ¿Michiru? -Haruka empezó a buscar el auto en todas direcciones y luego se dibujo una sonrisa en su rostro- Esta bien Michiru hoy te llevare flores...

No le preocupaba mucho que Michiru no estuviera, últimamente cada semana se ausentaba para darle a entender a su compañera que hiciera la cena y le llevara algo lindo, aunque realmente eso era lo que Haruka consideraba prudente, quizá Michiru quería algo mas. Pero la rubia siempre había tenido un pensamiento mas simple.

-Que extraño... pensé que Taiyo estaría por el camino -Últimamente a Darien le daba por pensar en voz alta- pues ya que, la veré luego, espero que no se pierda.

-Es muy extraño que una estudiante prodigio de universidad no conozca nada sobre el lugar donde nació.

-No es tan sencillo de explicar, sigo pensando en pros y contras.

-¿Respecto a que?

-Darien es mi único amigo porque sabe lo que soy... -Michiru había escuchado cosas peores por eso las palabras de Musume no la habían alterado- y... el lo descubrió por si mismo.

-Deberías considerar un poco mas el contarme, últimamente las personas que esconden cosas o sentimientos se han propagado y es justo eso lo que evitamos... o al menos tratábamos de evitar.

-¿trataban? esa debería ser un ideal eterno.

-La eternidad empieza a estar sobre valorada.

-La eternidad seria mejor entre las sombras -era la voz de Knight- lamento que tengas compañía.

-KNIGHT -Michiru saco su pluma de transformación, pero no tenia el valor para hacerlo delante de la chica- lárgate

-¿Que pasa niña, temes a ti misma? -su voz se convertía en una burla descarada para Michiru- ¿Tu vida o la de las dos?

¿Acaso Knight pensaba matar a Michiru y dejar que Musume corriera lejos? ¿Por qué no matarlas a las dos si podía hacerlo? 

-Michiru... Yo creo en ti... -Musume tomo el dije que colgaba de su cuello- y espero que tu hagas lo mimo.

-¡Por el poder del cristal del planeta Neptuno, transformación!

-¡Padre muestra mi verdadero ser!

Segundos después las dos chicas estaban listas para la pelea, pensamientos fugases cruzaron la mente de Neptune, ¿quien era esa chica? ¿Por que podía revelarse sin más? ¿que clase de amenaza enfrentaban ahora?

Sin previo aviso un dolor punzante atravesó el tobillo de la guardiana de las profundidades.

-Niña tonta,la inseguridad no te deja ver tu propia perdición.

En efecto el pie de da peliverde estaba enredado en una cadena que poco a poco desgarraba su piel.

-¡Escudo Hamal! - el escudo paso a cortar la cadena con solo tocarlo como si fuera el aire.

Neptune perdió el equilibrio cayendo sin mas, el frió le recorrió el cuerpo y la felicidad salio poco a poco de su ser. Tenia que ponerse de pie, no podía quedarse tirada sin hacer nada pero no lo lograba.

-No creas que te dejaremos hacer esto... -una mueca de dolor se dibujo en el rostro de Neptun- no nos dejaran solas... siempre vamos a estar unidas...

-Ellas no vendrán hoy... -la voz de Musume resonó en la cabeza de Michiru- tendremos que arreglárnoslas por nosotras mismas.

Sonaba muy simple, dos contra uno, pero hacerlo era mas complicado, Michiru era ya peso muerto y aunque Musume hacia las cosas con una determinación irreal ni siquiera ella sabia explicar que simplemente estaba improvisando.

La mente de Michiru empezó a trabar lo mas rápido posible llegando hasta ella la idea mas obvia que pudo tener, su espejo podría protegerla y ayudarlas a salir vivas de ahí.

-Por favor... -entre sus manos apareció el espejo que podría darle una oportunidad- a un lado sun ¡es mi turno!

Michiru empezó a invocar a su espejo pero ten rápido como ella pudo decir dos palabras una cadena plateada se enredo en el mango del espejo arrebatandoselo de las manos.

-Estúpida- una latigazo provoco que el espejo chocara contra el piso rompiendo su centro, eso no era posible, aquel talismán no debía romperse simplemente no podía era un arma fina pero poderosa, era increíble ver como se formaban grietas en su centro- tu debilidad se transmite, ¿donde quedo tu seguridad? a caso... ¿se la llevo el viento?

-¡Noo!- un par de lagrimas se derramaron en el rostro de la scout, había roto más que su espejo.. había roto su corazón-... cállate... por favor...

-Llora vamos te ayudare -una fina cadena se dirigía justo al cuello de la guardiana.

-¡Escudo Hamal! -Sun corto la cadena antes de que produjera otro ataque, pero la cadena que sostenía el espejo logro esquivar el escudo, golpeando con fuerza a Michiru ya sin fuerzas tirada en el suelo - ¡aléjate de ella!

Sailor Sun dio un salto con su escudo en lo alto pasando la esquina de este bastante cerca del rostro de Knigth, cortando su piel. No tardo mucho para que esa cortada empezara a regenerarse con pequeños destellos.

-¿Como es posible que una criatura tan hermosa sea tan inhumana?

-Me pregunto tantas cosas similares... ¿Como una arpía sin rostro llega a darme clases de moral? -La cara de Knigth se traducía en una mezcla de asco y pena- dulces sueños...

El rostro de Michuru se alzo para ver el dialogo, entonces un viento plateado con destellos azules llego a los pies de Knigth y empezó a subir hasta envolverlo completamente, lo mas extraño que pudo observar fue una luz azul celeste que recorrió los ojos de Knigth y al mismo tiempo un destello ámbar que recorrió los ojos de Musume y tal cual en el ultimo instante como un espejo los colores se invirtieron el los ojos de esas figuras, dándole a Musume unos ojos de una claridad impresionante y Knigth le otorgo una calidez en su mirar.

Entonces Michiru lo recordó... su comunicador. Tomo el pequeño brazalete y abrió la capsula para mandar el mensaje, el cuerpo le pesaba pero lo logro, mandando el mensaje justo en el momento donde una luz fue absorbida por la oscuridad llevandose consigo al caballero.

-... escúchenme... por... favor... -Michiru cerro los ojos y dejo de moverse.

¡Debemos Proteger nuestro futuro! Tokio de CristalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora