¡Debemos Proteger nuestro futuro! Tokio de Cristal

Inseguridad

-Su padre te tiene miedo, no puedes ir sola.

-Tengo que verla, somos su escolta.

-No Haruka aun no lo somos -bajo la mirada hasta el suelo- parece tan lejano nuestro futuro.

-Eso es precisamente lo que me preocupa, imagina un futuro donde la gente no crea en sus guardianes...

-Eso no pasara, aun es una niña y ha demostrado que puede hacerlo, eso lo sabes mejor que nadie... a veces eres un poco sobre protectora con ella.

-Michiru... tu lo sabes, ella es solamente una niña, no tienes que ponerte así...

-Bien vamos a verla, te dejare en la entrada.

Algunos días Michiru sacaba su lado mas frió con Haruka, frecuentemente con temas que involucraban a la princesa. Haruka condujo bastante rápido rozando los limites permitidos, algo a lo que la peliverde ya estaba acostumbrada.

-¿Vienes Michiru? -la chica negó con la cabeza, quería pensar- bueno dejare las llaves.

Haruka toco la puerta para esperar que alguien abriera, veía de reojo a Michiru que ya había cerrado los ojos. Entonces se abrió la puerta dejando ver al señor Kenji mas pálido de lo normal.

-Ha-Haruka... Mucho gusto... ¿Qué haces aquí?

-Quería ver a Serena... Me gustaría platicar con ella.

-S-si claro... esta en su habitación... ¡Pasa! -el señor Tsukino se hizo a un lado- si necesitas algo dilo.

-Gracias... -Haruka subió las escaleras y entonces escucho unas risas, seguramente eran las chicas.

-Claro, muchas gracias, pero no te preocupes no me perderé. 

Haruka abrió la puerta para encontrarse con una chica tan pálida como la nieve recostada sin fuerzas en cama, un chico con una gran sonrisa que le sostenía la mano y una pequeña que estaba a ponto de salir con la misma sonrisa.

-Cabeza de bombón -Haruka paso de Darien y la chica para ir directamente con Serena- Estas mejor ¿verdad?

-Esta muy débil no creo... -los ojos de la rubia cerraron la boca del principie.

-Con permiso, me tengo que ir... -la chica dejo a todos sin esperar a que alguien la acompañara.

-Has dormido ¿verdad? -Haruka abrazo a Serena desplazando a Darien- perdona por no venir antes..

-Ella esta bien... -la voz del chico era fría- yo la estaba cuidando.

-Se nota que has hecho un grandioso trabajo.

-Ha-Haruka.. -La voz de la princesa era débil, mas que un susurro- tengo miedo...

El corazón de Darien se paro en ese momento, algo lleno su pecho, sentía los pies pesados, la cabeza caliente y una espina en lo mas profundo de su orgullo.

-Dime que te pasa -la voz de la chica era de miedo, estaba muy preocupada por la niña que tenia en brazos- dime que tienes.

-Las pesadillas -Serena se aferro al pecho de Haruka tal cual lo haría una niña- Tengo miedo.

Era un berrinche, solamente eso, pero era un berrinche de Serena, de la princesa, de la niña de Darien... Se sentía desplazado, no podía contener su enojo mas tiempo, el quería que Serena le confiara todo, el quería ser el apoyo de su mujer, siempre, pero tal parecía que Serena no lo deseaba así.

-Haruka... cuídala. 

El salio con la mirada fija en el suelo con intención de subir a su auto y encontrar a su amiga por la calle para ir con Andrew a desahogarse.

Minutos antes...

La chica habia salido, ya sabia la forma para llegar a su casa sin ayuda, empezó a caminar cundo sintió una mirada penetrante, giro para ver sobre su hombro. Entonces sus ojos chocaron con los de Michiru. Por un momento pensó en regresar a su camino pero después se abrió la puerta del auto. 

-Oye, ¿quien eres tu? -Haruka no había hablado sobre la identidad de la nueva Sailor a detalle, pues ni siquiera la guerrera Urano sabia quien era en realidad- no sabia  que alguien a demás de las chicas de la preparatoria venían a visitar a Serena.

-Yo no soy de la preparatoria señorita Michiru.

-Estoy en desventaja, mi nombre es publico pero el tuyo es un misterio.

-Musume Taiyo, si se tiene curiosidad solo es  cuestión de preguntar -Taiyo camino hasta el auto pues estar hablando a distancia no era apropiado- la admiro mucho.

-Jamas te había visto, y ese uniforme no pertenece a ninguna preparatoria que yo conozca. -Haruka y Michiru se habían cambiado de escuela para estar mas cerca de su princesa, una decisión que no le agrado mucho a Michiru- y tampoco te reconozco dudo haberte visto por aquí.

-Yo no voy a la preparatoria, soy estudiante de la Universidad de Juban -Michiru se había quedado pasmada a pesar de reflejar una edad similar a la de ella estaba sobre las señoritas- ...junto a Darien.

Michiru había perdido parte de la conversación mientas examinaba , como era su costumbre con todos, a la chica. 

-Pero dime ¿qué haces fuera de la casa de esta niña, dentro de un auto y sola?

-Busco compañía para un paseo largo.

-Linda forma de buscar un acompañante, ¿quien sera el afortunado que ira contigo?

-Pensaba retirarme, pero vi a una linda chica a unto de cruzar la calle, seria bueno que me acompañara.

-No conozco toda la ciudad me hace falta una buena guía de turistas....

-Vamos entra, a menos de que tengas miedo de ser devorada.

-Una mujer que ya no tiene miedo de nada es la mas peligrosa de todas -camino elegantemente hasta el otro lado del auto para subir e ir con la chica que apenas conocía.

Michiru arranco el motor de auto de Haruka y se dirijo a la bahía cerca de su casa. Minutos después salio Darien buscando como había llegado Haruka a la casa de su novia, pero no le pareció extraño no ver nada que le ayudara, pues era bastante simple imaginarse a Haruka corriendo como el viento por toda la ciudad solamente para arruinar el intento desesperado de Darien por ser una buena pareja.

-Serena... -Haruka se quedaría con Serena hasta que esta quisiera hablar.

-Ya no quiero entrar aquí... todos me harán daño... -Haruka no entendía nada- no cierres los ojos...

-Tienes que dormir, descansar...

-S-si... -Serena se sentía herida, impotente, cerro los ojos sin la intención de pensar, simplemente se quedo expectante de aquel fondo oscura hasta estar segura de que su habitación estaba bacía para volver a abrir los ojos- no cierres los ojos.