𝟬𝟬𝟯 oblivion

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CAPÍTULO TRES:olvido

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CAPÍTULO TRES:
olvido.



      Los meses pasaban y ninguna de las mellizas Swan hacía esfuerzo por socializar, por diferentes razones

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      Los meses pasaban y ninguna de las mellizas Swan hacía esfuerzo por socializar, por diferentes razones. Bella estaba deprimida por la marcha de los Cullen, especialmente por Edward, y aún no habían vuelto. Cassadee se alejaba lo más posible de las personas, temiendo que fuera a intentar saciar su sed con ellos. Aunque, por alguna razón, ella no sufría tanto la sed cuando estaba rodeada de las personas a las que amaba. Le gustaba pensar que se trataba del hecho de que no podía imaginarse el lastimarlos de ninguna manera, nunca, pero dudaba que esa fuera la razón.

      La mayor de las mellizas tenía el mayor problema, y aún parecía socializar más. Iba a La Push a pasar tiempo con Jacob, buscando despejar su mente. La primera vez no salió tan bien, ya que Jacob notó su nueva apariencia. Él la había visto cuando ella volvió a casa, pero o no lo notó o no reaccionó. Nunca mencionó el tema directamente, e igualmente Cassadee sabía que él sabía que ella era un vampiro. Él era el único amigo que le quedaba. Los demás se fueron, e intentar conversar con Bella era como hablar con una pared. No tenía ánimos de conversar el último par de días, pero era lindo saber que alguien la escuchaba – que alguien en quien confiaba intentaba reconfortarla –. Pero no funcionó. Estaba atascada en sus pensamientos con solo ella misma.

      —Cassie, qué sorpresa verte—, exclamó Billy en cuanto abrió la puerta, la misma mirada impasible en su rostro como la de la noche que Cassadee había vuelto a su hogar.

      Ella ignoró la mirada y sonrió —. Sí, pensé que era hora de salir de casa. Tal vez pasar un tiempo con Jacob.

      — ¿Estás segura que esa es una buena idea?—, preguntó el hombre, asegurándose de bloquear el camino hacia el interior de la casa con su silla de ruedas —. No te ves bien.

      —Estoy completamente bien, Billy.

      —Tu piel pálida y ojos rojos me dicen otra cosa.

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