Capítulo 12

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Celos.

Alexa Blair.


Comenzaba a sentirme más cómoda con el ambiente que me rodeaba, las luces aun cambiaban mucho, el humo era molesto, y el olor a marihuana me seguía dando asco, pero toda la pandilla de Jason estaba en un mismo sillón circular, hablando de lo que sea. Incluso pasaban por jóvenes normales en una fiesta cualquiera, quizás por eso podía olvidar que no lo eran, sólo por esta noche.

Yo seguía junto a Jason, envuelta por su brazo, pero ya no estaba tensa por ello. Estaba consiente de que podría parecer que estábamos juntos, ¡Estaba casi sentada sobre su regazo, por Dios! Pero me hacia sentir un poco más cómoda, especialmente estando alrededor de tantas cosas desconocidas. Aunque el resto de las chicas en el lugar no opinaban igual; varias mujeres se habían acercado tratando de entablar alguna conversación trivial con Jason, aún cuando podían ver que estaba sentado conmigo. Han de estar acostumbradas, pero aún así es algo triste ver a una mujer rebajarse de esa manera.

─¿Cuándo fue la última vez que dejaste que Cara te llevara a su habitación, hermano? ─Por la sonrisa en su rostro, Nico estaba haciendo una pregunta desagradable.

─Ni siquiera lo recuerdo, debí haber estado borracho como la mierda. ─Respondió Adrian con una risotada.


Me pregunto quien será Cara.


─Probablemente fue hace un par de días entonces. ─Jason habló, burlándose.

─Si quieres hablar, McCann, ¿Por qué no nos cuentas como esta, Nadia? ─El tono burlón de Adrian seguía ahí, pero podía oír algo de hostilidad también.


Jason se tensó, y todo rastro de calma desapareció de su rostro cuando su mandíbula se apretó. ¿Qué demonios...? Olviden a Cara, ¿Quién es Nadia, y porque sólo su nombre tiene este efecto en Jason?


─No sé, Adrian, pero si tienes alguna urgencia por ella, estoy seguro de que debe estar en algún lugar por aquí.

─Me conoces tan bien, bebé. ─Una voz desconocida sonó desde detrás de nosotros.


Lo siguiente que vi fue como una pelirroja enfundada en un diminuto vestido negro entraba al medio del sillón, con una brillante sonrisa sobre sus labios rojos. Era linda, pero me daba una mala vibra impresionante.


─Wow, eres la única persona en esta casa que no conozco, y estas sobré mi chico. Algo esta mal aquí, ¿No crees? ─Habló sin perder su sonrisa, eso ponía mi sangre más caliente.


No respondí, sólo fijé mi vista en ella. Nadia. ¿Su chico, el que me proclamaba amor a mí? Pues si era la novia de Jason, que le reproché a él.

No planeaba quedarme aquí a escuchar una escena de alguien que ni conozco. Justo cuando iba a levantarme y a dejarlos, Juliet dejó el regazo de Kendrick para llegar a mí y jalarme de la mano.


─Acompáñame al baño. ─Fue todo lo que dijo antes de arrastrarme entre las personas que bailaban por todo el jardín.


Cuando nos adentramos en la casa ─que también se hallaba llena de personas─ giró en un pasillo que se vía obscuro en comparación a lo iluminada que estaba el resto de la casa. Del escote de su vestido sacó un llavero, ante lo que fruncí el ceño. Vaya lugar para guardar las llaves.

fighter ♤ j.m.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora