Lo que nunca sabrás (editando)

Capítulo 7

-Una pregunta- suelta de repente Nate, hablando por primera vez desde que llegamos. -¿Tu padre no suele venir al instituto hacia finales del último trimestre, en verano, para darnos la típica charla de las precauciones y reglas? Y por si alguien no lo ha notado aún acabamos de empezar las clases y estamos en pleno otoño.

A raíz del comentario de Nate, Mary, Gorgi y Rayan se pusieron a discutir sobre por qué estaría mi padre aquí. Me levanto y corro a coger un ratón que estaba a unos kilómetros de distancia de donde estábamos, cuando volví los tres seguían discutiendo, el único que no parecía interesado en la discusión era Nate, que volvía a estar callado. Estaba tumbado boca arriba en la hierva mientras miraba pensativo, de nuevo, su mano. No le dí importancia ya que llevaba así desde que nos habíamos despedido de As. No me gustaba nada verlo así ya que significaba que realmente algo, no muy bueno, estaba por ocurrir. El horroroso timbre que indicaba el final de la pausa para comer, sonó estridente como siempre sacándome de mis pensamientos de golpe.

Gracias a la charla que nos iba a dar mi padre, nos perdíamos Arte Gótico y criminología, la única que realmente me daba pena perderme era Arte Gótico, pero si mi padre tenía que hablar según todos era necesario parar todo, cosa que no entendía ya que había cosas que no eran realmente importantes.

Nos dirigimos a la pequeña sala de reuniones, aquella sala era una de mis favoritas del instituto, siempre estaba abierta, era polvorienta llena de telas de araña, y con sabanas blancas, ya medio grises por el transcurso de los siglos, cubriendo todas las mesas y sillones del lugar con un pequeño escenario justo enfrente de los grupos de sillones y mesas. Nos sentamos y esperamos a que el ridículo asistente de mi padre lo presentara para que él pudiera hablar.

- Bien, ya que estamos todos aquí procederemos a dar el anuncio del jefe. - dijo Necious, el agente de mi padre. - demos un aplauso a Isaac.- Todo esto era realmente ridículo ni que fuera un programa de televisión

- Gracias, Gracias - salió diciendo mi padre a la vez que saludaba mientras todos, excepto yo, aplaudían.

En aquel momento me dí cuenta de que únicamente se encontraba mi clase en la sala, y temí lo peor, ya que nuestra clase era en la cual se encontraban los vampiros con mejor condición física, los tres únicos del instituto que tenían el don de la lucha y los dones más peculiares, resumiendo nuestra clase estaba hecha para batallas, es más nuestra clase los lunes siempre tiene una hora extra empleada a entrenarnos y conseguir una mayor destreza.

- Os vengo a hablar de un proyecto en el que estamos trabajando los altos cargos de tres clanes vampiros distintos - comenzó a decir, ya serio mi padre - por ese motivo necesitamos a nuestros mejores jóvenes y por eso os llamo a vosotros - todo el mundo en la sala estaba muy serio y atento a todo lo que decía el jefe, menos yo que no era capaz de concentrarme en la charla ya que estaba demasiado nerviosa por lo que pudiera venir a continuación. Estoy cien por cien segura de que si mi corazón realmente bombeara, ahora mismo estaría que se me saldría del pecho.

- bien lo que necesitamos es que tres de vosotros os infiltréis en un instituto mundano, ya veremos cual mas adelante, y que investiguéis. Me han llegado avisos de que en un instituto de esta ciudad se encuentran escondidos cambia formas , y como sabéis este es nuestro territorio, en el cual, solo pueden entrar otros vampiros y los mundanos que viven alrededor, ellos tienen la entrada prohibida desde hace décadas...

- ¡¿Qué?! NI HABLAR, LLEVAS AÑOS DICIÉNDONOS QUE TENEMOS PROHIBIDO SALIR DE LOS LIMITES DEL BOSQUE Y JUNTARNOS CON LOS HUMANOS. - Grité antes de que terminase su explicación

- Bueno, teniendo en cuenta que tú ya te has saltado la norma de no acercarte a los humanos, no creo que suponga un problema para ti. - Dijo señalándose la nariz

Me escurrí todavía más en mi silla mientras el seguía explicando.

- Continuando donde iba ireis tres a investigar y nos direis toda la información que os pidamos.
Dicho esto se fue dejándonos a todos boquiabiertos.