La próxima generación

Capitulo 42: Encuentro con el abuelo

Lance: -pierde el sonrojo y lo ve algo shockeado- ¿Eh?

Ivlis: Lo que oiste, no me importaría que te guste, además, ese beso, nunca pensé que la veria alguna vez hacer eso

Lance: Eh, si –se sonroja al recordar que ya ella le había dado un beso similar cuando fueron a Jardin Gris- yo tampoco

Ivlis: -se da la vuelta y le pone la mano en el hombro- Dejame decirte algo, aun te falta para poder demostrarme que la mereces, pero, si no me equivoco te comportas mas seriamente por ella, sigue asi –le palmea el hombro- buena suerte chico –se va a sentar en su trono- puedes retirarte

Lance: -sonrie y luego se voltea haciendo una reverencia- Si Sr. Ivlis, nos vemos luego –se marcha-

Unos minutos después, en el pueblo, un portal aparece para dejar pasar a Siralos

Siralos: Muy bien, veamos si puedo preguntarle a alguien como hacer para poder ver a las princesas

Aunque el Dios ve hacia todos lados y busca a alguien que le pueda ayudar durante un rato, no encuentra a nadie y comienza a enfadarse

Siralos: -se cruza de brazos- ¿Es que en este lugar no hay nadie? –Ve a una chica demonio caminando por el camino principal con una niña pequeña tomada de la mano- mmm, veamos si ella me puede decir como entrar al castillo y conocer a mis lindas nietas –se acerca las dos demonios- disculpa

La chica voltea y carga a la pequeña como si hubiera tenido un refrejo para protegerla al no reconocerlo

Siralos: Oye, tranquila, no te hare daño, yo solo quería preguntar una cosa –ve a la pequeña un momento- (un segundo, se parece a, Ivlis, ¿sera que estas dos son?)

Poemi: Pues pregunta anciano, no tengo todo el dia, Papi se molestara si no volvemos a tiempo para la siesta de Iris

Siralos: -aparece una vena en su frente- (¿Anciano?) –La ve y suspira- (tranquilo Siralos, si estas dos son tus nietas, no querras que te odien) –sonrie como puede- disculpa, ¿es esta linda pequeña tu hermanita?

Poemi: -con algo de desconfianza- Eh, si ¿Por qué?

Siralos: ¿Cómo se llaman?

Poemi: Usted es muy raro, es de mala educación preguntar el nombre de alguien sin presentarte antes

Siralos: Oh, perdona, ¿Dónde están mis modales?, soy Siralos y les aseguro que no les hare ningún daño

Iris lo ve un momento y sonríe estirando su bracito derecho hacia el Dios

Poemi: Parece que le caíste bien, soy Poemi y ella es Iris, somos las hijas del Diablo de este mundo

Siralos: -simulando una cara de impresión- Vaya, pues su padre debe sentirse orgulloso de tener unas hijas tan lindas, (lo sabia, estas dos son mis nietas), ¿y su madre?

Poemi: No tengo, pero Iris si, solo que no esta aquí en el mundo llama

Siralos: ¿Eh?

¿?: ¡Poemi, Iris!

Poemi: -voltea hacia el camino al palacio y ve a su hermano mayor- ¡Hermanito Vendetto!

Vendetto: -se le acerca y le acaricia el pelo por entre los cuernos- Hola hermanita –le pellizca suavemente la mejilla a la nena- hola mi otra hermanita

Iris: Jijijiji, hoa

Poemi: ¿Qué te trae por aquí?

Siralos: -ve al joven de arriba abajo- (Este joven, Poemi acaba de llamarlo hermano, ¿sera verdad?)