Capitulo 42: Encuentro con el abuelo

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En el mundo llama, Ivlis se encontraba sentado en su trono observando a sus amadas hijas, la pequeña Iris de casi un año, había tenido un desarrollo increíble, había comenzado a caminar muy poco después de cumplir los 10 meses y ahora lo hacia perfectamente, en el habla aun le faltaba pulir su pronunciación, pero al menos se le entendía, mientras que Poemi era una hermana mayor increíble y cariñosa que amaba a la pequeña con todo su corazon

Poemi: -arrodillada con su pequeña hermanita sentada en las piernas mientras le cepilla el cabello en una colita de caballo- Si que tienes el cabello suave hermanita, adoro cepillártelo –le pone un lacito rojo de encaje- ya esta, ahora muéstrale a Papi lo linda que te deje

Iris: -abrazando el dragon de peluche que le regalo su hermana- Shi hemana –se para y corre hasta donde esta Ivlis- paupi, paupi, mira, hemana me dejo muy bonita

La pequeña además de tener el cabello recogido llevaba puesto un vestidito manga corta rojo con puntos negros en la falda hasta debajo de las rodillas, un tierno lazo negro en un lado la cinturita y un murciélago de fuego estampado en un lado de su pechito (N.A.: algo asi: http://vestidosbebes.com/wp-content/uploads/2015/04/Vestidos-bebes-1-a%C3%B1o-1.jpg), junto con unas mediecitas rojas y zapaticos de correa negros, todo junto la hacían ver adorable y coqueta

Ivlis: Si, estas en verdad preciosa Iris –la carga y sienta en sus piernas- tu hermana mayor hizo un exelente trabajo

Poemi: -se levanta y camina hacia su padre con una sonrisa orgullosa como si Iris hubiera ganado un concurso de belleza- Por supuesto, aunque no necesite hacer mucho –la carga y le da un gran y dulce beso a su hermanita en la mejilla haciéndola reir- es tan linda que en realidad no lo necesita

Ivlis: Jajajaja, no importa cuantas veces las vea, ustedes me parecen las mejores hermanas –se levanta para abrazarlas- en verdad las quiero a ambas

En ese momento entra Lance, que al ver a la familia real abrazados sonríe, le gustaba ver esas escenas tan dulces, en especial por la princesa mayor, ya que desde que estuvo con ella buscando a Sonya, le parecía una chica muy linda, pero luego pone una cara seria y se aclara la garganta, llamando la atención de los tres

Ivlis: ¿Si?

Lance: Discupen la interrupción, pero es la hora del paseo diario de las princesas

Ivlis: Oh, cierto –ve a sus hijas- ¿quieren que vaya con ustedes?

Poemi: Note preocupes Papi, podemos defendernos solas

Ivlis: Lo se, pero aun asi me preocupa que se puedan encontrar con algun peligro o alguien les pueda hacer daño

Poemi: Jaja, estaremos bien –le da un beso el la mejilla y ayuda a su hermanita a hacer lo mismo- nos vemos mas tarde –se acerca al chico- gracias por habisarnos –le da un beso en la mejilla- mi lindo juguete

Ivlis: -con cara de "que demonios acaba de hacer"- ¡Poemi!

Poemi: Jiji –trota un poco para no escuchar el regaño de su padre- nos vemos después

Lance: -voltea a verla irse y ve como le lanza un pequeño beso- Si, hasta luego princesa Poemi

Ivlis: -se le acerca y lo ve con las los puños en la cadera- Oye

Lance: -da un respingo- Ah –voltea nervioso- ¿si Sr. Ivlis?

Ivlis: Por la cara que pusiste y lo que acabo de ver –se cruza de brazos- supongo que te gusta Poemi

Lance: -se sonroja- Ah, no, no para nada, yo solo, pues

Ivlis: Por que si es asi, te aconsejo que me des motivos para merecerla

La próxima generaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora