Un Verano Desastroso [#CG2]

5.

—Me gustaría que mi única hija se case y tenga hijos. Por qué me vas a dar nietos, ¿cierto?

Esto es el colmo.

Salí del baño lista.

—Mejor vamos, se hace tarde—dije llevando a Brea y a Mamá conmigo.

*

Al fin tenía la casa para mi sola por las siguientes cinco semanas.

Por esa razón, me traje a mis amigos a quedarse conmigo.

—Tenemos que hacer una mega fiesta—dijo Corey una vez que tiró su bolso en el sillón del living.

—¿Tú vives de fiestas?—preguntó Marleen sentándose.

—Somos jóvenes, tenemos que disfrutar del momento antes de que vayamos a la universidad, así que si, vivo para las fiestas.

—Buen punto—dijo Lester chocando las manos con su gemelo.

—¿Únicamente nosotros estaríamos en la fiesta? —pregunté.

—Puedo avisarles a algunos chicos del instituto y que corran la voz ¿no?—propuso Marleen.

—Bien, pero después de que la fiesta termine todos limpiaremos—indique—Mamá, dijo que mantuviéramos la casa en orden y sin romper las cosas.

Corey hizo un saludo sargento.

—Entendido. Por cierto, ¿invitarás a tu vecina?

—Si.

—Por eso te quiero—dijo levantándome.

Me reí.

—No invites a Bethany—habló Brea—no me cae bien.

—¿Quién es Bethany?—preguntó Ciara.

—La hermana melliza de Alexa.

—Tengo que hacerlo, no tengo opción—bufé , al igual que a mi prima esa chica me daba mala espina—No puedo ser descortés.

Ella rodó los ojos.

Tomé asiento al lado de Max, este se mantuvo callado.

—Wilson— le pellizque su mejilla.

Él curvo una sonrisa que hizo que por un momento me convirtiera en gelatina.

—¿Qué pasa, Brown?

—Estarás en la fiesta ¿No?

—Claro que si—dijo pasando un brazo por mis hombros, lo normal.

— Mi madre cree que tú y yo somos novios—reí— Está loca, hasta quiere una cena para platicar contigo.

—Entonces vendré a esa cena.

Me aparté un poco de su lado y miré su perfil, ya que él estaba observando a los chicos.

—No somos novios.

Max giró su cabeza hacia mi.

—Soy tu amigo, y eso no me impide aceptar una cena de tu madre.

—Bien— dije lentamente— Entonces, solo amigos.

Necesitaba aclararlo.

—Amigos—sonrió de costado sin apartar la mirada de mi—¿Puedo besarte?

Bien, éramos amigos, pero que lo seamos no nos impide besarnos ¿no?

Mis amigos ya estaban al tanto de lo sucedido en la discoteca.