Tan raro como que me llamo Do Kyungsoo me acerqué a él y lo besé. Tomando sus mejillas con ambas manos y apretando fuertemente nuestros labios. Al separarme de ese beso hice un sonido de «Muuua».







— ¿Hoy se acaba el mundo o algo así? Debería marcar este día como fecha especial y festejarlo todos los años.




Que exagerado, a veces pregunto si en realidad soy yo el raro en esta relación.


kai me señaló con su dedo índice. Tú raro y yo dramático. Ahora se auto señalaba.









Comencé a reír por tales palabras. Kai volvió a besarme, un beso largo y cada vez su cuerpo se acercaba más al mío haciéndome retroceder hasta la otra esquina del sofá y sentirme acorralado por él. Y esta es su indirecta para "subida de tono". Esta vez, no me detuve. Tomé el cuello de su camisa color blanca y corté la distancia de nuestros cuerpos. Kai detuvo el beso y me miró a los ojos.






K-kyung



Entendí tu indirecta, y la estoy aceptando.



— ¿Estas seguro?



Muy seguro.









La verdad, no se si estaba seguro pero de que quería, quería. Kai sonrió y volvió a besar mis labios esta vez con más fuerza y sujetando mi cabello. El sofá y el calor ya nos estaba incomodando, JongIn se levantó sin detener el beso y de paso me cargó. Rodee mis piernas por su cintura y mis manos abrazadas a su cuello. Lentamente Kai comienza a caminar hasta dirigirse a nuestra habitación, esa habitación donde solo hemos dormido juntos, mas no había pasado nada hasta hoy. Recostandome con sumo cuidado sobre las sábanas color crema para luego detener el beso por falta de aire. Me miró detenidamente mientras su respiración estaba totalmente hecha un lío igual que la mía.





— ¿Estas seguro, Kyung?


L-lo estoy






Sonrió ampliamente y colocó sus labios en los míos ligeramente, para luego desplazarlos a mi mejilla derecha siguiendo un camino hasta mi cuello para después morderlo, haciendo que sintiera un especie de ¿placer? Jamas sentido. Estoy seguro, completamente seguro que para Kai todo esto ya es algo normal, pero para mi todo era nuevo. Todo se sentía como si estuviera en una nube, flotando sin preocupaciones o cuando escuchas tu canción favorita sin que nadie te interrumpa. Es algo grandioso que no puedo explicar.

Sus manos tocaban todo mi cuerpo, siendo un experto en eso. Kai recorrió todo mi cuerpo y luego quitó mi camisa retirando de paso la suya tiradas en alguna parte de esta habitación. Pude apreciar y tocar la piel morena de mi novio. Nuestros cuerpos rozaban, kai besaba cada rincón de el. Mis manos a veces se posaban en el cuello de JongIn o simplemente en su cabello. Raramente, decidí actuar.

Ahora era yo quien acorralaba a Kai contra la cama y mi cuerpo, me senté sobre él y pude notar la cara de excitación mezclado con sorpresa por mi reciente forma de actuar. Comencé por besar sus labios mientras este sujetaba con fuerza mi cabello. Sus manos se fueron desplazando hasta mi cintura creando un tipo fricción entre nuestros miembros. Esto era demasiado excitante, en medio de todo esto olvidé todos mis miedos y las palabras de Yixing llegaron a mi mente. «Disfruta el momento».

Lentamente comencé a bajar hasta llegar a su abdomen, escuché un leve gemido por parte de Kai que aún no soltaba mi cabello. Mis manos comenzaron a masajear su miembro ya erecto, por encima de la ropa. Al momento de tocarlo Kai dio un brinco de placer y pude notar que me estaba mirando, nuestras miradas se cruzaron y su cara era única.

El Raro Del Segundo Piso [KaiSoo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora