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   Alex despertó, a las 6:30 en punto,  por aquel molesto sonido de la alarma, jodido "ti ti ti".  

  He aquí de nuevo a la maldita rutina, de nuevo a las tareas, de nuevo a los golpes, de nuevo a ver a las mismas personas que siendo sinceros no le caen para nada... en fin, he aquí el comienzo a un nuevo año escolar.

 Decidió levantarse a las 6:45, con su mayor esfuerzo. "Oh, genial, Alex, llegaras tarde a tu primer día de clases, maldito flojo". Se metió a bañar lo más apurado que pudo. Ni siquiera tubo tiempo para pensar que tan malo sería este año, no tuvo un minuto para ponerse mal y eso era algo bueno en cierta forma. Estuvo listo a las 7:10, justo a tiempo para poder comer algo e ir a buscar a su amigo Kellin sin ninguna tardanza, porque siendo coherentes nadie quiere que la diva se enoje. 

 Kellin era un cerebrito pero no de esos feos que se pasan todo el día en una biblioteca. Él era atractivo y se pasa el día jugando vídeo juegos o saliendo con amigos, bueno, tampoco tenía muchos. 

 El joven Gaskarth terminó de desayunar 7:15, perfecto, tomo su mochila y se dirigió a la casa de Kells, para su suerte eran vecinos. Llego justo a tiempo, tocó la puerta y a los segundos salió el morocho con una sonrisa de oreja a oreja, iniciando su caminata hacía el colegio. 

-Volvemos a la cárcel ¿Cómo rayos puedes tener esa sonrisa?- gruñó Alex. No se creía un amargado pero pero que otros estuviesen felices cuando el estaba enojado le molestaba.

-Hola, Kells ¿Cómo estas? Bien ¿y tú, Lex? Oh, para la mierda.- El morocho fingió la voz de su amigo, de una manera pésima.- Vamos, 'Lex no puede ser tan malo, aunque por lo que veo no llegaste ni a peinarte así que si es bastante malo para ti. 

 Alex abrió la boca para contestar pero la cerro al instante y se paso las manos por la cabeza, era cierto, no se había acordado de peinarse. Hoy definitivamente seria un día malo. Kellin solo soltó una risa y paso un brazo por los hombros de el más chico.

-Este día no será tan malo, escuche que el pequeño Mikey no irá al internado este año y que Gerard llegó ayer del campamento aunque igual asistiría hoy a clases. Pero tienes que actuar como si no lo supieras.

 Alex sonrió, no había visto a Gerard en todo el verano y, aunque si vio a Mikey, que este año  no se fuera era algo bueno. Y así siguieron el resto del camino, hablando cosas casi sin sentido.

 Por fin habían llegado. "Maryland's Middle School" se leía en aquel desgastado portón viejo, los alumnos estaban repartidos por todas las afueras del instituto -era una tradición que no se podía entrar al edificio hasta comenzada la hora de clase-. Los dos amigos simplemente ignoraron a todos y fueron a su manzano, ese árbol estaba marcado como suyo desde... siempre. Recostados en aquella planta estaban los hermanos Way.

"Recuerda, Alex, actúa como si no supieras que ellos iban a estar aquí hoy".

  -Chicos ¿qué hacen aquí?- intento fingir que no sabía nada, pero a Alex le iba mal en la actuación y más que una sonrisa de sorpresa le salió una mueca. 

-¿Ya lo sabías, no?- dijo Gerard, abrazando a sus amigos, el castaño asintió.- Kellin fue ¿no?-. El oji-azul hizo una seña con la cabeza para que dijese que no, pero como todo el buen amigo que era Gaskarth asintió, y por esto empezó una mini pelea entre Gerard y Kellin.  
 La campana sonó, indicando el comienzo de las clases, aunque primero debían ir a la asamblea que se daba para preparar a todos para el año escolar.
 El amontonamiento de alumnos se hizo presente por el pasillo que lleva al gran salón. Gerard y Kellin habían dejado de pelear para conseguir asientos, Alex y Mikey solo iban atrás comentando lo idiota y diva que era el comportamiento de Gee y Kells.
 

The Irony Of Choking On A Lifesaver (Jalex)Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon