Capítulo 72

2.4K 191 22
                                    

How I wish I could surrender my soul;

Shed the clothes that become my skin;

See the liar that burns within my needing.

How I wish I'd chosen darkness from cold.

How I wish I had screamed out loud,

Instead I've found no meaning.


I guess it's time I run far, far away; find comfort in pain,

All pleasure's the same: it just keeps me from trouble.

Hides my true shape, like Dorian Gray.

I've heard what they say, but I'm not here for trouble.

It's more than just words: it's just tears and rain.


How I wish I could walk through the doors of my mind;

Hold memory close at hand,

Help me understand the years.

How I wish I could choose between Heaven and Hell.

How I wish I would save my soul.

I'm so cold from fear.


I guess it's time I run far, far away; find comfort in pain,

All pleasure's the same: it just keeps me from trouble.

Hides my true shape, like Dorian Gray.

I've heard what they say, but I'm not here for trouble.

Far, far away; find comfort in pain.

All pleasure's the same: it just keeps me from trouble.

It's more than just words: it's just tears and rain.

[ Tears and rain - James Blunt ]


Daisy.

Mis dos últimas semanas en Inglaterra pasan apenas en un suspiro.

Tras haber hablado con Harry sobre ese espacio en blanco en el que se ha convertido nuestra relación, me dije que aún tenía tiempo de sobra para poder tomarme las cosas con calma y decidir sin ningún tipo de presión qué es lo mejor tanto para él como para los dos en general.

Sin embargo, al final he ido posponiendo esa maldita decisión tanto tiempo que, cuando me doy cuenta, apenas quedan tres malditos días para mi viaje a Nueva York.

Aunque, si soy sincera, debo decir que, en realidad, tengo excusas para justificar el hecho de haber procrastinado durante prácticamente dos semanas el haberme sentado a pensar en qué hacer.

Si durante estas dos semanas casi he desaparecido del mapa es porque los últimos preparativos de mi viaje a Nueva York me han tenido completamente ensimismada, así mismo como la necesidad casi obsesiva de pasar el máximo tiempo posible tanto con mi familia como con mis amigos.

Por una parte, desde nuestra vuelta de esas tan necesitadas vacaciones no he parado de ir de un lugar a otro comprando todo lo necesario para Nueva York, y pasando horas delante del ordenador o con el teléfono pegado a la oreja ultimando la reserva de mi habitación en la residencia, terminando de enviar el resto del dinero que faltaba de la señal del Conservatorio, terminando la matrícula y todo ese tipo de cosas de las que uno no se tiene que preocupar durante su etapa como menor de edad, pero que se convierten en algo esencial en su vida a partir de los dieciocho años.

Faithfully [actbh #2]Where stories live. Discover now