¿Simple Ladrón? [Nicudy]

Capitulo 3

Al llegar al pasillo en el que se encontraban las celdas, la pequeña coneja se dirigió hacia la celda seis, donde ella debía cuidar de aquel zorro llamado Nick Wilde.

Esta carcel no era igual a las otras, esta era especial para robos, en otras palabras un carcel para "delitos menores", la otra carcel de alta vigilancia era especialmente para aquellos que asesinarán o dañaran a otro animal, "delitos mayores".

Caminó directo a la celda seis, dejando pasar cuatro puertas tras ella.

— ¿Esas son las celdas? — dijo Judy, para después admirar aquellas grandes puertas de roble.

Algo curioso porque deberían ser unas simples celdas delante de un prisionero, pero no, esto era diferente, muy diferente. Al abrir cualquier puerta te encontrabas con una amplia habitación que esta dividida en dos, un lado donde estaba la puerta de salida y el otro con la reja, en la que se encuentra el encarcelado.

O al menos eso mostraba una foto que traía el pequeño listado.
Se debe admitir que esto es muy arreglado cómo para ser una carcel.

— Se supone que es para que el preso reflexione sobres sus acciones  — repitió lo que el listado tenía escrito hasta abajo — Creo que aquí cumplen caprichos — dijo al dar un gran suspiro.

Al estar frente a la puerta que tenía el numero seis, se tensó.

Sus padres alguna vez le dijeron que no es bueno fiarse de la gente, y mucho menos de un zorro.

— Tranquila... Todo estará bien — se dijo, y con valor abrió la puerta.

Al hacer eso pudo mirar todo el interior de la habitación, aun no entendía porque tenía que a ver tanta individualidad.

— ¿Hola? — miraba de un lado a otro, ella esperaba inmediatamente encontrarse con Wilde, pero este no se lograba apreciar en ningún lado.

Miró detenidamente cada punto tras esa celda, hasta que logró ver al zorro, el cual se encontraba sentado en una esquina, mientras veía fijamente a la pequeña criatura que hace segundos había abierto esa puerta.

— Oh... — toma aire. — ¡Hola, soy...

La interrumpe. — ¡Judy! Sí, ya lo sé — dijo, y apartó la mirada.

— Sí ¡Bueno! Soy Judy Hopps, y estaré a cargo de ti, hasta que tu sentencia termine — le dijo, pero pareciera que hablaba sola. El ojos esmeralda sólo se quedó callado, ignorando la que la pequeña coneja le había dicho.

— Hmm... — se voltea, dándole la espalda a Judy.

— Sí... — juega con sus manos. — Eso significa que estaré contigo por... Tres meses — agregó.

— Ajá...

— Y bueno me gustaría llevarme bien contigo, ya que pues nos veremos muy seguido, y estaría bien tener un lazo de confianza entre nosotros, ¿no lo crees?

Mueve un poco su oreja izquierda. — Bueno... — finalmente se voltea. — ¿Qué es lo que quieres saber?

— ¿Eh?

— Sí, ¿qué quieres saber de mí?, ya que quieres tener "un lazo de confianza entre nosotros" — dijo,mientras movía sus dedos.

— ¡Oh! claro... Pues ya se lo básico sobre ti, te llamas Nick Wilde, y pues... ¡Eres un zorro! Y... ¡¿Un ladrón de palitos de paleta?! — dijo, mientras leía la lista.

Se ríe. — Que te digo, al parecer soy malévolo — se encoge de hombros.

— Y pues... que tal si,me cuentas tus... ¿tus gustos?

— Me gusta vender cosas...

— Oh, que interes...

— Vender cosas que robé — sonríe.

— E-Eh...

— Soy un ladrón, querida, ¿qué esperabas?

— Bueno...

El zorro se rió un poco. — Me encanta cuando te quedas sin habla — comentó entre dientes.

— ¡¿E-Eh?!

— Nada, nada — se sigue riendo. — Creo que me caes bien, Judy — se acerca.

— Oh, gracias.

Se sienta frente a la reja. — No eres de esta cuidad, ¿cierto? — le pregunta, mientras mira atentamente.

— Soy de un lugar muy alejado de Zootopia, vivía con mis padres, junto a mis más de 200 hermanos — le contestó  sonriente.

— ¿Y que te trajo aquí? ¿Por qué quisiste mudarte a la gran Zootopia?

— Pues cumplir mi sueño de ser Policía, ya que de donde vengo no es fácil conseguirlo.

— ¿Llegaste sola?

— Pues sí, sí llegué sola, y planeo visitar a mi familia con el dinero que jun... ¡Espera! ¡yo soy al policía aquí! ¡yo soy la que debe hacer las preguntas!

Se ríe. — Lo que tu digas — le sonríe.

Sí, ese zorro era un manipulador, puede que algo coqueto, pero dibujó una sonrisa en el rostro de la pequeña Judy.

No eres tan malo después de todo.

— Tan, tan, ya es hora de irse, Hopps — le dice, mientras se recuesta en el frío suelo.

— ¿Eh? — mira su reloj, que apuntaba las 8:30 pm. — Es verdad, bueno, me despido, adiós Wilde — abre la puerta.

— Adiós, Hopps.

Salió y cerró la puerta detrás de ella.
No fue tan malo, en realidad Nick Wilde es alguien amigable, aunque sea un ladrón.

Después de una media hora, Judy llegó a su departamento, y sin nada que hacer, decidió llamar a sus padres.

— Bien, tal vez ellos quieran saber como fue mi día — dijo, y pulsó la tecla de llamar.

— Oh, hola mi pequeña niña, ¿cómo te fue de guardia? — le preguntó con alegría Bonnie, su madre.

— Nada mal, estuvo bien.

— ¡Que bueno Judy! ¿a quién cuidas?

— Cuido a Nick, Nick Wilde.

— Oh, ¿qué animal es?

— Es un... — Judy se quedó inmóvil al pensar que ella cuidaba de la clase de animal que sus padres temían, zorro.

— ¿Sí?

— Un z-zo — los nervios empezaban a dominarla, si su madre se entera la obligaría a renunciar al papel de guardia, pero ¿por qué Judy no quería perder ese puesto?

— ¿Un z-zo?

— Zorro... — dijo en voz baja.

— Judy Hopps, no estoy para juegos, ahora, dime qué clase de animal es él — dijo con firmeza.

— Bueno, él es un zorr...

— ¡¿Bonnie podrías ayudarme con esta carreta?! — grita su padre, que al parecer esta trabajando.

— ¡Oh! ¡ya voy querido! — le contesta. — bueno, por ahora te salvaste, pero no durará — se ríe. — te hablo luego cariño — se despide y cuelga.

— Adiós, madre — suspira. — Esto no será para nada fácil.

Se supone que somos enemigos naturales, no debo encariñarme contigo Nick.

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¡Asdasdsdadsdasdd, Holiwis!

¡Contemplen la hermosa imagen en súper HD! Okno
¡Estoy nerviosa! Necesito ganar los boletos para la premiere de Zootopia.

No los necesito, no los necesito, definitivamente no los necesito, no los necesito, no los... ¡LOS NECESITO!

Sayonara ❤️