Carolina Fox cree que su pase al cielo y su salvación ante la cruel humanidad que la rodea, es ser una monja definitiva.
Pero no pensó que el padre Louis y la madre superiora decidieran guiarla por el camino de la prueba divina, pues a sabiendas de que ella tomó el noviciado -por razones un tanto estúpidas-, querían hacerla entender si ese era el camino que ella realmente deseaba tomar.
Ser novia de Dios no era un juego.
Y en periodo de prueba, es enviada a otra ciudad, en donde deberá vivir como una chica normal incapaz de traicionar a Dios, y es allí en donde Lina tendrá que mudarse y más de una vez tendrá que buscar huéspedes para pagar el alquiler del apartamento.
No va a fiesta, no toma alcohol y tampoco se droga. En fin, no hace nada más que sentarse en el sofá con la Biblia y leer la consagrada palabras del señor. Asegurándose que ir de vez en cuando al convento y enseñarle la palabra de Dios a otros niños, es más que suficiente para dar su prueba finalizada y decidir que camino tomar.
Éso, hasta que su inquilina extraña decide mudarse, dejándola sola y con el pago de una gran renta, y por tales razones decide poner el cuarto en alquiler, sin contar que a tan solo minutos, un sexy y extraño chico tocaría su puerta pidiendo ser su nuevo huésped.
Aceptar la llevará a la perdición absoluta, y condenará su alma con las tentaciones prohibidas de aquel chico con mirada misteriosa.
El diablo llega vestido de huésped, no te confíes tanto.
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Benditas tentaciones
Teen Fiction"No temas, porque el diablo llega vestido de huésped" ➕➕➕➕➕➕ Lina es exactamente el tipo de chica que evita tomar, fumar e ir a fiestas. Si, esa chica que por alguna razón decidió ser monja. Todo cambia para ella cuando en su intento de pagar su peq...
