Capitulo 33

492 27 0
                                    

Él señor Carlos se fue a hacer la donación mientras yo iba a comprar la pizza y los libros, acabe de comprar aquellos libros y camine hacia el local de pizzas, antes de que pudiese entrar un chico se me acerco.

—Luke, ¿cierto? —dice este de la forma más normal.

—Depende, ¿quién eres tú?

—Eso es lo de menos, escuche de ti por alguien.

—¿Qué fue?

—Buscas venganza, pero no sabes cómo lógrala cuando no tienes acceso a nada.

—¿Quién eres?

—Seré un migo tuyo y compañero de trabajo muy pronto, pero quiero ayudarte con tu venganza.

—¿Por qué motivo?

—Yo igual busco venganza Luke y sé que si trabajamos juntos la lograremos más rápido.

—Bien trabajemos juntos, solo dime cuando te veré.

—En unos días Luke no seas tan impaciente.

—Me llevas ventaja tu sabes mi nombre y el porque me quiero vengar yo no.

—Te lo diré cundo nos veamos de nuevo, ahora no— se aleja de ahí.

Narra Cecilia.

Le pago al taxista y salgo, entro a ese hotel y voy hacia el cuarto 213, toco la puerta una vez y esta se abre rápido, siento unos brazos en mi cintura y cuando este acaba de abrazarme ya estoy adentro del cuarto.

—Te extrañe tanto— dice en mi cuello.

—Yo igual, ciento haberme ido— paso mis brazos por su cuello y lo acerco.

—No importa, lo importante es que al fin estas aquí— besa mis labios rápidamente y luego me sonríe.

—Brooklyn— susurro.

—Se siente bien tenerte tan cercas— susurra y se va acercando lentamente hasta que corta aquella distancia y me besa lentamente— creí que no vendrías.

—No soy tan cruel Brooklyn.

—Me gustan las chicas crueles.

—¿Me debo sentir alagada?

—Tal vez— me vuelve a besar— ¿cuándo regresarás a México?

—En dos días.

—Te fuiste mucho tiempo linda.

—Solo fueron cinco meses bueno tres, los otros dos estaba en México.

—Y no me llamaste— hace un puchero.

—Lo siento, estaba ocupada con el trabajo y Luke solo lo empeoro.

—¿Siguen peleándose mucho?

—No, bueno no es tanto, por lo menos en estos dos meses que han pasado ya no peleamos tanto, digamos que ambos nos estamos acostumbrando.

—¿Él te gusta? —me pone entre sus piernas.

—¡Que!, claro que no Brooklyn— paso mis manos por su cuello y empiezo a jugar con su pelo.

—Más te vale Irwin— me da un beso corto.

—¿Me estas amenazando? —digo mientras enarco una ceja o eso intento.

—No sabes enarcar una ceja— dice mientras él lo hace.

—Aish... No, no sé cómo carajos se hace.

—Es fácil, solo haces esto— vuelve a enarcar una ceja.

—Que gran explicación Brooklyn, creo me quedó claro.

—Tu que no eres una buena alumna.

—Así— me acercó a él y nuestras respiraciones empiezan a juntarse, sin pensarlo más acabó con esa cercanía y lo beso.

Crime Family ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora