capitulo 10

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-narra Lauren-

Estaba durmiendo al lado de Lisa, me desperté para tomar algo de agua porque tenía sed. Apenas abri los ojos me encontré con su cara, estaba durmiendo con tanta calma que me daba miedo. Intente despertarla ya que me daba vergüenza bajar a buscar agua sola. Pero a la vez me dio pena ya que dormía tan en paz.
Baje ya que no hubo señales de querer despertar, tome un vaso y serví un poco de agua.
-ay, aquí estas-. Dijo alguien atrás mio, me hizo asustar así que solté el vaso y se rompió en 20 millones de pedazos.
-lo siento, lo siento! Ya lo limpio-. Dije juntando los pedazos de vidrios
Ella prendió la luz y cuando lo hizo me corte un poco la mano
-aah!-. Dije sacudiendo mi mano un poco.
-que paso? Te cortaste?-. Preguntó viniendo a mi rápido
-cuidado! Estas descalza y hay vidrios aqui-. Dije
-deja yo lo junto, ve y fíjate si no te quedó algún vidrio o algo-. Me dijo, eso fue lo que hice y no, no me quedaba nada sólo sangre y sangre y un poco más de sangre
-ya, como estas?-. Pregunto tomando mi mano
-ouch-. Dije ya que me dolia un poco
-que es esto? Ahora me toca a mi ser tu enfermera?-. Me preguntó riendo
-eso parece-. Le dije sonriendo un poco. Fuimos a la oficina, supongo que de su padre no se, lo que se es que había un escritorio con tres sillas. Ella se puso en la grande y yo en la del otro lado del escritorio poniendo mi mano sobre el. Ella sacó el botiquín y comenzó a curarme.
-no me dolerá no?-. Pregunte
-sere cuidadosa-. Dijo ella
Las dos comenzamos a reír porque eso es lo que le había dicho a ella esa vez que se cayo de la moto.
-bien-. Dije y ella comenzó a ponerme alcohol. Cerre los ojos porque me ardía, ella soplo sobre la herida y se me calmó un poco.
-bien, sólo tengo que besarte, digo... Vendarle la mano-. Yo sólo me rei un poco porque se había confundido
-bese mi mano-. Le dije una vez que término de vendarme
Ella tomo mi mano y le dio un beso arriba de donde estabas la herida
-ahora se curara más rapido-. Me dijo ella riendo un poco
Era tan tierna que podia morir de amor. Igual no tenía que pensar así, más de ella que se estaba por casar.
-no lo dudó-. Le dije
-vamos a la cama?-. Me preguntó.
Así que fuimos nuevamente pero ninguna de las dos podía dormir.
Empezamos a hablar de su infancia, y de la mía. Y lo raro que era que nunca nos hayamos cruzado, si de pequeña estaba ahí.
-es raro como nos conocimos-. Me dijo ella
-por sus caídas-. Dije yo riendo
-si, por torpe-. Dijo ella mirando al techo
-creo que por algo pasan las cosas. Es raro lo que me pasa a mi con vos-. Le dije y cuando termine de decirlo me odie mil años
-que te pasa conmigo -. Me preguntó ella acostándose se costado y mirándome directo a los ojos
-me gusta pasar tiempo contigo, me gusta la amistad que tenemos-. Dije rápido
-la amistad... Es linda-. Dijo ella parecía decepcionada, no se si me consideraba su amiga, tal vez la puse incómoda confirmando eso.
-sabes, tengo sueño. Mañana hablamos-. Me dijo y se dio vuelta.
-que duermas bien-. Le dije y le di un beso en su mejilla
Me di vuelta y me dispuse a dormir.

Blanco Y NegroWhere stories live. Discover now