Capítulo 7 [segunda parte].

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Kagome.

Me fui con Ichiro aunque por alguna razón me sentía muy nerviosa. Estábamos caminando pero él no decía nada, vaya que sin duda es Sesshomaru. Bufé, realmente me aburría más que al estar con mis amigas, ¡literalmente no decía nada! Iba con esa expresión seria de siempre y hasta se podría decir que no me notaba. Me sentí un poco molesta, llego a buscarme ¿Para alejarme de mis amigas o qué rayos?.
A decir verdad, estar al lado de él es como estar al lado de Sesshomaru, no hay ninguna diferencia en ese aspecto. Esa sensación de sentirse ignorada pero a la vez protegida, esa es la sensación cuando estás al lado de él. —Kagome.. —Lo oí susurrar. ¿Qué querría decirme? ¿De verdad planea decirme algo?—Ha pasado mucho tiempo. —Dijo. Yo lo mire confundida, ¿Ahora a que se refiere?

—¿Eh?

Rió, ¡Estaba riendo! Esto realmente es suerte, es algo que no ves todos los días. Él subió su brazo y corrió la manga de se camisa un poco para mirar el reloj, pude jurar que en el brazo vi las mismas marcas que tiene Sesshomaru aunque seguro era solo mi imaginación al ser la reencarnación de él. Él me miró de reojo, su mirada, pueden pasar miles de años y esa mirada no cambiará nunca.

—¿Cuántos años tienes? —Pregunto de la nada. Esto me está dejando cada vez más confundida.

—15..

—Mm..

¿En serio? ¿Sólo eso? Podría decirme algo un poco más interesante, esto es muy extraño es un hombre que conocí en la mañana y ahora me lo encuentro de nuevo y me separa de mis amigas para preguntarme cuantos años tengo. Qué pérdida de tiempo. Me detuve, él se dio cuenta y se detuvo también. Se volteó y me miró fijamente. En ese preciso momento, no había nadie, nadie más que él y yo. Su mirada dorada estaba clavada fijamente en la mía y no la quitaba. Pude ver un brillo especial en sus ojos, fue algo realmente bello.

—¿No te enseñaron a no confiar en extraños? En especial si tienen casi 3000 años —Me quedé estática. ¿Qué? ¿Escuche bien? Otra pequeña sonrisa apareció en sus labios. No estaba segura de lo que estaba pasando, no sabía si era una ilusión o un sueño pero a mí al rededor había una pradera y en frente mío estaba Sesshomaru con su larga cabellera plateada y esos ojos que disparan desprecio, él estaba ahí delante mío mirándome fijamente. Mire sus manos, por alguna razón tenía las dos, seguro al ser una ilusión es por eso que aún tiene los dos—. Humana —Esa palabra, esa maldita palabra. Reaccione de nuevo, el mall estaba de nuevo y las personas. Ichiro me miraba fijamente con una ceja levantada, parpadee varias veces y fruncí el ceño. ¿Porque no de una vez me dice que él es Sesshomaru? O al menos su reencarnación. —¿Pasa algo, Kagome?

—Yo..—No sabía qué decirle. Si le decía que me lo había imaginado como un apuesto demonio que conozco se podría burlar de mí— ¿Qué fue lo que dijiste? —Pregunte aún confundida. Él se acercó a mí y toco mi frente—. Dime.

—Que si no te enseñaron a no confiar en extraños. Es que como accediste tan fácil..

—Luego de eso.. Dijiste otra cosa —Una de sus delgadas cejas volvió a levantarse. Nos quedamos en silencio mirándonos fijamente. Agarre su mano y la separe de mi frente. Cuando choque mi mano con la de Sesshomaru aquella noche pude sentir que era suave y Fría y esta es igual. Me sonroje y lentamente corrí su manga para observar su brazo. Mi corazón se detuvo, esas marcas no habían sido mi imaginación. Los ojos de Ichiro brillaron más, el dorado de volvió más intenso. Con una sonrisa de medio lado se acercó a mí oído causándome un escalofrío por toda la espalda.

—Es insoportable estar rodeado de tantos humanos, inclusive tener que actuar como uno.. —Susurró de manera seductora. Mis ojos se abrieron como platos al escuchar esas palabras, por un momento me volví a sentir en la era feudal. Me separe de él y con cuidado agarre un mechón de cabello, lo subí un poco y mis ojos presenciaron unas puntiagudas orejas.

—Sesshomaru.. —Susurre. El apartó mi mano y se acomodó el cabello de nuevo. Su mirada fría volvió a aparecer.

—Ha pasado mucho tiempo —Repitió. Dirigí mis manos a mi pecho, mi corazón se iba a salir en cualquier momento. Nunca en lo que llevó de conocer a este hombre lo había tenido tan cerca. Mi cara comenzó a arder, seguro estaba rojísima— ¿Porqué tan nerviosa, mujer? — Pregunto cruzado de brazos. Yo no sabía que responder, ni siquiera sabía porque me sentía así. InuYasha nunca me hizo sonrojar de esa manera, ¿Porque este hombre sí? ¿Porque Sesshomaru? ¿A qué se debe esto?

—¿C-cómo es que estás..?

—Soy un demonio, Kagome —Dijo– ¿Qué esperabas?

—No pensaba que estuvieras aquí.. —El soltó su 'Hmph'.

—Tu no perteneces a este mundo —Me miró fijamente. Sin ningún indicio de que fuera broma o algo parecido.

—P-pero aquí nací y mi familia.. —El suspiro.

—Pero tú no eres de este mundo, ¿Crees que puedes pasar ese maldito pozo solo por ser una reencarnación? Pues así no es.

—Creo que eso ya me lo habían dicho. ¿Porqué no me dijiste en la mañana quién eres? Nada te costaba.

—Solo quería ver si podrías darte cuenta —me dijo dándose la vuelta. —¿Aún con la ilusión te costó no? —asentí—. Bueno, yo debo irme. Nos veremos en menos de lo que piensas, mujer — Dicho esto comenzó a caminar hasta desaparecer de mi vista. ¿Qué acaba de pasar? Hable con total naturalidad con Sesshomaru aunque su frialdad e indiferencia permanecían. Aun no sé qué pensar, mi corazón reaccionó ante la voz de Sesshomaru, mi cuerpo temblaba e incluso me sonroje incontables veces. Realmente algo no anda bien.

Di un largo suspiro y comencé a caminar. Aunque fue algo rápido y repentino me sorprendió mucho verlo en le presente. Salí del mall, luego le daría una explicación a las chicas, necesitaba Ir a descansar y luego estudiar, el otro día habría examen de inglés y si no reprobaría y eso no puede pasar.

Nos veremos en menos de lo que piensas, mujer..

Tal vez él si lo sabía, pero el Sesshomaru del pasado no tiene ni idea de lo que está pasando, él nunca sabrá nada de esto hasta que se forme el verdadero futuro. Puede ser que yo cambie las cosas y el no llegue hasta el presente, muchas cosas pueden suceder.

Llegue a mi casa, salude a mi mamá y al abuelo, Sota no estaba. Subí a mi habitación y deje la mochila a un lado. Busque ropa limpia y me dirigí al baño para luego meterme en la tina de agua caliente y relajarme. Extrañaba bañarme de esta manera, aunque allá hay aguas termales pero nada como bañarse en casa.

Salí de la tina, me seque y luego me vestí para ir a la habitación a comenzar a estudiar. Me va a costar mucho concentrarme pero bueno, debo intentarlo mañana tengo examen de ingles y pasado mañana de Matemáticas y casi no sé nada. —¡Ahora sí, a estudiar! —Saque la libreta y el libro y comencé a leer y memorizar lo que decía. Ingles nunca ha sido un obstáculo. Tengo que salir bien, aunque sea apenas, así podré ir a la era feudal sin preocupaciones.

¿Qué me has hecho, mujer? || Sesshomaru y Kagome.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora