Capítulo 6: Muestra de cariño.

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Tan pronto como Marx terminó de establecer y especificar las indicaciones necesarias para darles una bienvenida apropiada a sus invitadas del Reino de Hoshido, el príncipe Leon buscó la manera de acercarse de nueva cuenta a Kamui, pretendiendo continuar con la conversación que se vio obligado a suspender debido a lo que les anunciaron en un momento inoportuno, o que por menos él consideró inadecuado. Al principio no se le presentaron complicaciones, ni por más mínimas que éstas fueran, el verdadero problema surgió cuando avanzaban con la plática, pues Kamui parecía estar más interesada en el tema de las visitas que en otra cosa.

Comentando ese pequeño obstáculo con sus queridas hermanas, habiéndose percatado que Camilla y Elise ya sospechaban sobre cuáles eran sus verdaderos sentimientos hacia la chica de plateados cabellos, el príncipe sólo intensificó su convencimiento respecto a que tenía que movilizarse antes de que Hinoka y Sakura llegaran al castillo Krakenburg, porque después de la aparición de la Familia Real, el tiempo que pudiera compartir y disfrutar con su amada sería bastante limitado, por no decir nulo.

Pero el ensimismamiento de Kamui con las convidadas era tanto, que obtener tan siquiera un poco de su atención empezaba a considerarse misión imposible. Leon lo descubrió cuando trataba de mantener la plática en torno a cualquier tema opuesto a la nación vecina, y a causa de ello, terminaba siendo ignorado y suplantado por algo de supuesta mayor importancia, hecho que no sólo conseguía enfadarlo, también alcanzaba el límite de su paciencia. Para calmarse y pensar con claridad, se decía cosas como: "se trata de sus hermanas, su actitud despreocupada por otros asuntos es entendible" o "en algún momento tiene que dedicarse a algo distinto".

Mientras esperaba que aquél venturoso y codiciado momento se hiciera presente, optó por comenzar a brindarle ayuda a su hermano mayor con toda la cuestión de la recepción, puesto que no quería que la Realeza Hoshidan fuera acogida de la peor manera posible, cuya fatídica secuela no sería otra más que una Kamui molesta, triste y con un terrible disgusto por tan mala hospitalidad que mostraron hacia sus estimadas allegadas. Con algo de suerte, su beneficencia terminaría como punto a su favor.

El soberano de Nohr aceptó el apoyo, complacido y asombrado por la actitud afable que en escasas ocasiones manifestaba el joven, pero que siempre era bien agradecida; aunque una inevitable sensación de amargura se hizo presente al notar que no había mejora alguna en su situación con la princesa mitad dragón. Tendría que darle la razón a Lazward cuando decía que los hombres a veces necesitaban una leve asistencia en cuanto a temas amorosos se tratase, sin embargo, él estaba convencido que su consanguíneo no necesitaba de uno o dos empujones, sino el impulso completo. ¿O acaso el problema radicaba en Kamui? Siendo así, las soluciones a éste se hallaban lejos de su alcance.

Una vez que Leon hubo llegado al despacho —que era el único lugar dentro del enorme recinto donde el estrépito parecía ser mucho más ligero—, se encontró con el monarca y sus subordinados; éstos últimos, al advertir su presencia, dieron inicio a un interrogatorio concerniente su situación sentimental, ya que ellos participaron como espectadores cuando el príncipe le reclamó a su privilegiado señor quién sabe cuántas cosas sobre una supuesta traición. Las respuestas que Pieri y Lazward obtuvieron se limitaban a protestas del muchacho, en las cuales demandaba tanta indiscreción de su parte con asuntos que sólo le debían interesar a él.

Lo más cercano a una insignificante discusión, logró entretener y divertir a Marx por un buen rato, y únicamente cuando creyó que ya era hora de ocupar el tiempo en algo productivo, puso fin a la trivial disputa. Los retenes se disculparon con Leon por parlotear tan abiertamente de esos problemas, prometiendo que jamás hablarían de ello si él no lo requería, y como el menor definitivamente no deseaba recordar aquellos amargos acontecimientos, volver a tocar el tema estaba fuera de sus preferencias.

❀℘ TE QUIERO SOLO PARA MÍ | REVISANDO |Where stories live. Discover now