El Hermano De Mi Amiga. [AC#1]

22. Chico Matthew's

Ha pasado media hora desde que Meg y Chad se fueron y estoy más que aburrida viendo Screem Queens.

Y suena el molesto sonido de la puerta.

Doy un gruñido, me levanto como puedo del sillón y voy a abrir la puerta.

Agh, es el odioso chico Matthew's.

Esperen, esperen... ¿¿¡¡MATT!!?? ¿¿¡¡CÓMO MIERDA CONSIGUIÓ MI DIRECCIÓN!!??

Creí que jamás lo volvería a ver en mi vida, y resulta que ahora sabe donde vivo.

Genial.

-Hola.- Dijo pícaro.

-¿Cómo mierda conseguiste mi dirección?

-¿Me vas a dejar pasar?

-¿Enserio piensas que voy a dejar pasar un chico Matthew's psicópata que me siguió hasta mi casa?

-Mira, vengo aquí porque pienso que empezamos con el pie izquierdo. Si no nos hubiéramos dicho nuestras escuelas, no nos odiaríamos, y quizás... No lo sé... Hubiera funcionado algo...

Lo quedé mirando por unos segundos.

Ogh, realmente me convenció de que quería empezar de nuevo.

-Cállate si no quieres que te golpee. Bueno, pasa.- Dije de mala gana.

Él sacó una sonrisa y entró a la casa.

Suspiré y cerré la puerta.

-Wow, sí que es grande tu casa.- Dijo admirando el lugar.

-Sí, sí. Vamos afuera, chico Matthew's.

Y lo llevé al gran patio que tiene mi casa.

-Y más encima es grande tu patio.- Siguió.

-Ya cállate.- Lo callé con risa.

Él se sentó en el pasto al frente de la piscina mientras yo caminaba en el borde de la piscina haciendo equilibrio.
Se sacó su chaqueta y la dejó junto a él en el pasto.

-Y... Así que eres primo de Alex.- Traté de iniciar una conversación ya que todo estaba en silencio.

-Así es. Y tú eres prima de Meg y Chad Collins, ¿No?

Lo miré con los ojos como platos. O él es un psicópata pedófilo, o mi vida entera está en internet y el me buscó.

Este tipo es raro.

-Ok... Sigo pensando que eres un psicópata maniático que me quiere violar.- Dije riendo.

-No, sólo... Alex me habló de ti. Oye... ¿Qué es eso de ahí?- Dijo señalando algo en la piscina.

-¿Qué cosa?- Dije agachándome para ver qué había ahí.

-No lo sé... Tal vez...- Y con eso me empujó a la piscina.- ¡Una Kim mojada!

Le fruncí el ceño.

-Wow, que chistoso eres, Matt.- Dije sarcástica.- ¿Así tratas a las mujeres?

-Lo siento, déjame ayudarte.- Respondió parándose y estirando su brazo.

Yo lo agarré del brazo y lo tiré a la piscina.

-Estamos a mano.- Le aclaré.

-Sólo por poco.- Me advirtió.

Luego le tiré un poco de agua en la cara. Y él comenzó a tirarme agua.

Así fue como empezó la típica guerra de agua en la piscina.