¿Estoy dentro?

2.9K 216 50
                                    


Suelto un cansado suspiro a la vez que salgo del departamento agitando en mi mano derecha la pequeña bolsita con marihuana que acabo de sacar de mi habitación. Me encuentro en el pasillo abierto de mi departamento o mejor dicho una especie de balcón en conjunto y asomo mi cabeza hacía abajo observando como aquellos chicos que trabajan para mi están mirando hacia todos lados por si alguien está tratando de hacernos alguna emboscada. Mi mirada se encuentra con uno de ellos y mueven su cabeza en asentimiento dandome a entender que se encuentra todo tranquilo.

Con confianza me siento en el piso pequeño portico de mi departamento y saco unos cuantos papelillos de mi bolsillo izquierdo para comenzar a preparar un porro. A medida que mis dedos trabajan en esa motrocidad fina tratando de generar el mejor porro en años, no puedo dejar de pensar en las últimas cosas que han ocurrido. Pareciera como si de un segundo a otro mi vida completa hubiese dado un giro en 360° y todo comenzaba a cambiar. Era dificil para mi tener que acostumbrarme a tantos cambios. Nunca había sido un fanatico de ellos, me gustaba mi vida tal cual era. Yo tenía el control de todo y no tenía que consultar absolutamente nada por nadie. Pero por sobre todo, siempre había estado feliz de no tener a ninguna chica trabajando con nosotros, las cosas siempre se complicaban. Y ahora mismo, en un abrir y cerrar de ojos tengo a dos chicas con un temperamento digno de un puma trabajando para mi, como si eso fuese poco, una de ellas es mi hermana.


Aún no podía asumir bien el hecho de que Camille se encontraba de vuelta, pareciera que mi cerebro aún no estaba listo para procesar dicha información. Por muy frío que sonara, yo ya me había acostumbrado a estar sin ella, mis teorías siempre habían sido dos: Camille tenía una vida perfecta o ella jodidamente estaba muerta. Incluso cuando la segunda opción hacia que viniese un dolor a mi pecho, hubiese preferido eso a tener que tenerla a mi lado. Yo no podía perderla. Una cosa era perder a tu hermana por circunstancias de la vida que no pudieses manejar. Si Camille hubiese muerto durante el tiempo que estuvo viviendo en Inglaterra, probablemente me hubiese vuelto loco, sí. Sin embargo, mi cabeza hubiese estado tranquila al saber que no habría sido culpa mía. Y ahora, asumiendo que ella malditamente iba a pasar la prueba del día de mañana, ahora tenía que vivir con el miedo de que Camille pudiese morir y esta vez, sería culpa mía.

Yo estaba acostumbrado a vivir bajo presión, a cada momento del día cuando caminaba, tenía que mirar mis espaldas para saber si había algún tonto policia novato que quisiera llevarme detenido o incluso algún idiota que me odiara que podría estar apuntando mi cabeza. Sin embargo, Camille siempre fue mi talón de aquiles, no importaba cuanto tiempo hubiese pasado ella seguiría siendolo. Sé que probablemente ella mismo ahora se está comiendo la cabeza en casa de Styles preguntandose porque demonios actué de esa manera. Pero ella era inteligente, estoy seguro de que no tardaría en averiguar que mi falta de emoción al verla no significaba que yo no confiase en su persona, era el simple miedo de perder a alguien. Yo ya había perdido a mi padre, ya tenía que cargar con su muerte durante toda mi vida, no podría hacer lo mismo con mi hermana pequeña.


Una vez que el porro se encuentra listo lo llevo hasta mis labios y dejo que el humo entre por mis pulmones tratando de relajarme. Las toxinas comienzan a actuar rapidamente, haciando que me sienta al menos un poco más relajado. Entonces, otro problema viene a mi cabeza:

Kylie.

Sabía desde un comienzo que ella iba a ser un problema en mi vida. En el momento en que Malcom le había ofrecido el trabajo supe que no iba a deshacerme de ella, no importaba lo que pasara, Kylie iba a estar a mi lado. Por extraño que sonara, la idea tampoco me digustaba del todo. Sí, Kylie podía ser un dolor en el culo, desagradable, fría, malevola y probablemente la palabra perra le quedaba malditamente pequeña. Sin embargo ella también tenía un montón de cosas buenas. Y una de esas, era la manera en como me hacía sentir. No de esas mariconadas "te amo, casemonos" si no que ella me hacía conocer estados animos nuevos. Antes de conocerla, había olvidado lo que era realmente divertirse. Usualmente estaba muy ocupado encontrandome molesto con las personas como para notar que sentía mucho más que eso.

She's not good {Justin Bieber pov's} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora