La pesadilla(1 parte)

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Caminaba por la acera mientras mis lágrimas caían por mi rostro, mi mente parece que me odia porque hace que cada cinco minutos recuerde la discusión que tuve con Harry hace unos minutos...

-¡¡Es tu culpa!!

Con esa palabra había confirmado lo que todo este tiempo me había reprochado, sus palabras no fueron con dolor por que había recibido la noticia de que habían muerto sus padre...fue con odio, no comprendía el porqué, pero él mismo se encargó de decírmelo.

- Ellos se sacrificaron por ti, en ese auto no deberían haber ido ellos sino tú.

No me había dado cuenta que estaba corriendo, por culpa de las lágrimas no me di cuenta y choque con un hombre. Caí y me raspe la rodilla, en el suelo me limpie las lágrimas y pude ver que el hombre se acercaba, tenía una chaqueta de color negro y unas gafas oscuras, Me dio la mano.

- ¿por qué llora una niña tan linda como tú?- Me ayudo a levantarme, saco de su bolsillo un pañuelo y me lo dio para secar mis lágrimas.

-No deberías estar sola por aquí- Mire a mi alrededor y no reconocía las calles, no sabía en qué momento se había oscurecido el cielo, al descubrir porque Harry me culpaba por su dolor, lo único que paso por mi cabeza fue huir, Solo corrí sin saber hacia dónde me dirigía, y ahora estaba en un barrio desconocido con un dolor en mi rodilla, sin mencionar el de mis pies y con un hombre en frente esperando mi respuesta. Pero no podía hablar, aún tenía un nudo en la garganta.

- ¿Estas perdida?... quieres que te lleve a tu casa.

- No... No tengo.- Dije bajando la mirada, sentía que más lágrimas iban a salir, así que las aparte lo más pronto posible. Él hombre me miro por unos minutos, me sonrió y dijo.

- ¿Quieres decirme que no tienes una familia?

-Si...

-¿Quieres una?...

Asentí y empezamos a caminar, nos adentramos a un barrio no muy seguro, pude ver a algunos niños jugando con una pelota, sus ropas estaban gastadas y sucias, mire al hombre que me llevaba cogida de la mano, me miro de reojo y me sonrió, por un instante me pareció ver a James... Pero eso es imposible porque está muerto, pensé. Caminamos unas cuadras más y llegamos a una gran casa.

- Bienvenida a tu nuevo hogar- dijo señalándola, me quede mirándolo, solo en ese mismo instante me pregunte ¿qué estaba haciendo parada frente a un hombre que era extraño y por qué lo había seguido?

-Está bien, no te alarmes, no te voy a hacer daño, solo que no podía dejar a una niña tan linda en estas calles tan peligrosas.- Al parecer había visto mi cara de preocupación.

-¡¡llegaste!!-dijo alguien a mis espaldas y después vi que era un niño corriendo hacia él, me miro con una sonrisa.

- ¿Quién es ella?- el hombre me miro.

-Ella es... ¿cómo te llamas?

-Ash...

-Ok  él es Tayler, y yo soy Sailas.

El niño se acercó y me dio la mano- ven te mostrare la casa- dijo llevándome a ella, y en el momento que pase por esa gran puerta de madera, comenzó mi pesadilla...










la chica rudaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora