Capitulo 40

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POV Camila.

¿Les había dicho sobre como mi libido había estado un poco fuera de control?, ahora está peor, Lauren no desaprovechaba ninguna oportunidad para provocarme, comenzaba a ser frustrante.

¡Estoy sexualmente frustrada!

No sé que ha hecho, que clase de psicología usa pero prácticamente me tiene cruzando los dedos cada vez que se acerca a mi no sea una tonta prueba. Si también estaba afectado mi humor, comenzaba a irritarme más rápido y ella solo se reía. ¡Se ríe!, me está volviendo loca, no pensé que tuviese esta parte y menos que esta parte de mí fuese tan estremecedoramente fuerte, me está controlando por completo. Santi se había ido a su país por el cumpleaños de su madre y se quedaría un par de semanas allá, lo que significaba que teníamos el departamento totalmente solo para nosotras dos, algo que me encanta porque así puedo pasar más tiempo con ella, pero al mismo tiempo está tensión sexual que está creciendo y puedo sentirla, tanto que es palpable, me desequilibra. 

Los días pasan normales, nos levantamos, vamos a la universidad, volvemos, salimos algún lugar o simplemente nos quedamos en la noche, el problema viene cuando es momento de dormir. Algo iluminó a Lauren y ha decidido dormir solo con un top y unas muy diminutas pantys, ¡Tres hurra por su maravillosa idea!. ¿Les dije de la regla de no tocar que también la impuso?, ya sé que sueno desesperada y en parte lo estoy, traten de tener a la persona que quieren y que además sea jodidamente sexy y esté tumbada en tu cama a unos cuantos centímetros de ti pero no puedas tocarla, ¿me entienden ahora?.

- Juro que odio a ese profesor, ya teníamos la modelo, habíamos hecho las primeras tomas, ¡y ahora nos dice que ha cambiado de opinión! – comenzó a quejarse Lauren.

- ¿Y trataron de hablar luego con él? – le pregunté acercándome a ella para poder calmarla un poco.

- ¡Sí!, pero él insiste. Es un pervertido solo quiere vernos a Alexa y a mi – dijo soltándose de mí.

Problema número dos, Alexa Ferrer. Confío en Lauren pero esa pequeña y escurridiza chica, no. Últimamente pasaban todo el tiempo juntas, por lo del trabajo final, entendía eso. Lo que no lograba entender era, ¿porque siempre estaba encima de ella?, bueno no encima, pero siempre la tenía que estar tocando. Mis nervios comenzaban alterarse, es que, volviendo al problema número uno, ¿por qué no podía estar conmigo?, ¿acaso no le atraigo?. Esta última pregunta comenzaba a rondar cada vez más frecuente en mi cabeza.

- ¿Camz? – me llamó, haciéndome aterrizar de nuevo en la realidad.

- Lo siento, me perdí, ¿qué? – le dije tratando de reubicarme de nuevo en la situación.

- ¿Qué si no te importa? – me preguntó, esperando mi reacción.

- ¿Qué cosa?

- Que me tome las fotos con Alexa.

¡Bum!, en blanco.

- Obvio no – respondí con una sonrisa, ella me sonrió de vuelta y me dio un rápido beso en los labios.

- ¿Tienes hambre? – me preguntó, yo solo asentí.

Debía hacer una lista mental de mis problemas, era algo que hacía desde pequeña pero había dejado la costumbre, era un tipo de ejercicio que me enseñó mi mamá para que no me preocupara de más.

Lista de problemas de Camila:

(No sé cómo poner lo del sexo, porque si pongo sexo, significaría que el sexo es el problema, lo que es totalmente falso porque no he tenido. Tampoco quiero sonar muy desesperada porque en el fondo no lo estoy, es simplemente frustrante. Tampoco el problema es Lauren, aunque en parte sí, pero no.)

Descubrir (Adaptación Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora