El Soldado Del Viento

Capítulo 26.

Cuando llego al portal me encuentro a Carla apoyada contra la puerta llorando incontroladamente.

En cuanto nota que estoy a su lado se lanza en mis brazos y yo no puedo hacer otra cosa que abrazarla.

Pasan varios minutos hasta que sus sollozos se hacen más calmados y las lágrimas cesan.

Me aparto de ella y la miro a los ojos buscando alguna explicación.

-Annie...

-¿Qué ha pasado?- pregunto agarrándola el brazo.

Carla vuelve a agachar la cabeza y rompe a llorar otra vez.

-¡¿Qué pasa?!- grito desesperada mientras la agarro de los hombros con demasiada fuerza, tanta que noto en su cara una mueca de dolor.

-Es Noelia...

-¿Noe? ¿Qué la pasa? ¿Está bien?- Carla intenta asimilar todas las preguntas mientras niega con la cabeza.- ¡Contéstame!

-Alguien avisó a los soldados diciendo que había sido su familia quien había matado al general americano. Varios soldados fueron a su casa, uno de ellos vio una mancha de sangre en el suelo, se puso nervioso y empezó a disparar y...

-No... ¡no!

Echo a correr negando con la cabeza mientras las lágrimas caen por mi cara sin permiso alguno. Paso las calles de mi destrozada ciudad corriendo casi apartando a empujones a la gente de mi alrededor. Algunos me insultan o me devuelven el empujón, pero yo ni me inmuto.

Al irme acercando a la calle donde vive Noe empiezan a llegar a mis oídos los ruidos de la sirena de policía. Sigo corriendo y el corazón se me acelera.

"No es posible"  me repito una y otra vez.

Por fin veo la casa, está el coche de policía con la sirena puesta, una ambulancia, muchos soldados y decenas de personas rodeando la casa.

Me paro en seco y mis piernas empiezan a temblar.

Esto no puede estar pasando.

Lo primero que veo con claridad es la silueta de Gavan, que viene hacia a mí. Y luego su rostro, serio demasiado serio.

La ira crece en mi interior e intento esquivarle para llegar hasta la casa, pero su brazo me rodea y me empuja contra su pecho.

Me retiene contra su pecho y eso me pone aún más nerviosa pues mi cabeza no quiere asimilar lo que está pasando, solo quiere buscar otra explicación.

Forcejeo en sus brazos intentando liberarme, pero no consigo nada, así que empiezo a pegarle puñetazos sobre el pecho mientras histérica, chillo.

-¡Suéltame! ¡Gavan, suéltame! ¡Qué me sueltes joder!

No sé si entiende lo que digo, pero parece que sí. Sigo pegándole mientras él como respuesta me abraza más fuerte, hasta que me deja inmovilizada, llorando contra su piel.

Gimo mientras me acuna en su pecho sin creer lo que está sucediendo.

Durante unos segundos siento como si mi cabeza se hubiera desconectado de mi cuerpo, como si estuviera en un estado de inconsciencia hasta que oigo los gritos de un policía pidiendo que abran paso.

Me aparto de Gavan, pero él enreda sus dedos en los míos impidiéndome salir corriendo.

La gente se aparta de las puertas de la casa mientras cuatro personas con uniforme de policía sacan una camilla con un cuerpo sin vida tapado por un plástico de color amarillo metalizado que solo se puede relacionar con una palabra.

Muerte.

El corazón se me para y Gavan rodea mi cintura con sus brazos pegándome completamente a él.

Mi cabeza empieza a dar vueltas.

Quizás no sea ella, puede que sea su madre o su hermano o su padre.

Seguro que Noe está dentro escondida en algún sitio.

Pero, mi mirada se clava en una mano del cuerpo sin vida que no ha sido tapada por el plástico. En la muñeca del brazo hay una pulsera plateada demasiado familiar.

Como si se tratará de un flashback el recuerdo de Carla y de mí regalándole a Noe esa pulsera por su decimoquinto cumpleaños atraviesa mi cabeza como si se tratase de una bala.

Mi cuerpo reacciona como si le hubieran propiciado una descarga eléctrica.

Intento irme y frenar la camilla, pero una vez más, los brazos de Gavan me lo impiden.

Entierra mi cabeza en su pecho para evitar que vea la camilla pero ya es demasiado tarde.

Lloro y sollozo sin consuelo alguno deseando que la tierra me trague y me lleve de este mundo lleno de injusticia.

-Todo va a salir bien, todo va a salir bien.- susurra Gavan en mi oído tantas veces que parece una plegaria.

"Otra mentira piadosa." pienso antes de que mi vista se nuble por las lágrimas.

*Nota de la autora: Hola a todos! Aquí os traigo el nuevo capítulo del que ya os había hablado,  he tardado en acabarlo más de lo que esperaba así que una vez más os pido disculpas.

Espero que este capítulo os guste a pesar de que es un capítulo duro y que va a dar mucho de lo que hablar.

Probablemente os esperabais otra cosa pero esta escena ya llevaba planeada casi desde el principio de la historia .

Espero poder subir el próximo capítulo en menos tiempo y por supuesto son bienvenidos cualquier comentario o crítica.

Muchas gracias por leer la historia, por los votos y por los comentarios que ayudan mucho, gracias de verdad.

Sin más os dejo y nos leeremos pronto.

Besos xx