La hermana perdida de Liam Payne

Capítulo 11 | Barbie

Logan Lerman como Spencer Scott. :)

Sky

Liam estaba sentado leyendo el periódico, Harry y Louis estaban jugando con un balón de fútbol, y Zayn y Niall estaban viendo un partido de fútbol. No sé si se han dado cuenta, pero Liam me había castigado por tres meses, y ni siquiera tenía la oportunidad de salir o usar mi celular, y era el segundo día del castigo.

-¿me podrían dejar usar mi teléfono?-me quejo. Louis me mira y ríe.

-No.-dice, y sigue jugando con el simio de Harry.

-¿porque no?-pregunto.-Solo hice lo que mis amigos hicieron, yo ni siquiera le toque un puto ladrillo al colegio.-me quejo. Iba a matar a Michael y a Calum, eso estaba bien claro.

-Aun peor, estuviste con tus amigos, que son mala influencia.-dice Liam. Ruedo los ojos. ¿Mala influencia? Por dios, miren quien habla.

-¿mala influencia?-digo.

-Si, demonios, Skylar, uno tenía el pelo azul y lleno de tatuajes, y el otro estaba vestido totalmente de negro, y claramente era Asiático, y los
chinos comen perros y ranas.-dice Harry.-no son buena espina-continúa.

-Los odio, ¿lo sabían?-ruedo los ojos.

-Puedes usar mi consola de juegos, pero no te quiero ver usar internet.-dice Louis, pasándome su Nintendo. ¿En serio? Tiene como, mil juegos aquí adentro, uy, y uno de ellos es Barbie en París.

-¿Porque tienes Barbie en París?-pregunto riendo. Louis frunce el ceño, cuando los demás chicos empiezan a reír igual que yo.

-son de mi hermana, no me jodan.-protesta, rapándome el Nintendo.

-¡Oye!-me quejo.😡

-¡oye!-Louis me imita. Le saco el dedo del medio, y este me saca la lengua.

Corro escaleras arriba, y m encierro en mi habitación.

A) tenía que hacer un plan para poder salir de aquí.

B) tengo que ser discreta porque Liam no se puede enterar.

C) Nah, solamente quería poner el c. 😂

Agarro la sábana de mi cama, (y A lo Romeo y Julietta) lanzo la sabana haciendo que caiga como una escalera. Me cuelgo, y salto hacia el piso.

¿Y ahora qué hago?

Saco mi billetera cuando veo a un señor del carrito de helados al frente de la casa, estaba cantando una canción y decía "Paletas, Paletas "

Cuando intento correr, alguien se cae encima mío.

-L-Lo s-Siento, y-yo...-un chico de ojos azules y pelo negro me ayuda a pararme. Tenía unas gafas redondas, como si fuera un intelectual. Cargaba un libro en la mano, y su camiseta era de cuadros, estaba totalmente sonrojado.

-Descuida, yo soy la torpe.-digo riendo, el chico hace una mueca, y mira sus pies.

-P-Perdón, n-no era m-mi i-intención.-se disculpa de nuevo, pero esta ves, se rasca la nuca.

-Como decía antes, da igual. Mira, si en serio quieres que te perdone, cómprame un helado.-me burlo riendo. El chico hace una mueca de nuevo.

-N-No t-tengo dinero-dice mordiéndose las uñas.

Ruedo los ojos.

-Era una broma, yo te compro el helado.-El sonríe. Saco cuatro dólares, y se los entrego al señor del carrito. Este me entrega un helado de chocolate y el otro de pasión.

-¿chocolate, verdad?-le pregunto al chico, este asiente y susurra un "gracias"

-S-sí.-dice. Le entrego la paleta, y salimos juntos caminando.-¿Cómo se que no eres una asesina?-Dice, dándole un mordisco a su paleta.

-Bueno, para empezar, no te lo diría, y segundo, creo que ya te hubiera matado.-Admito riendo. El chico se me queda mirando embobada mente.-¿Q-Qué?-pregunto nerviosa.

Odiaba que la gente me mirara.

-N-Nada, e-es q-que e-eres m-muy h-hermosa.-admite.

-Wow, soy como una extraña para ti, quiero saber primero tu nombre, " chico que me dice hermosa cuando no lo soy." -digo en tono de burla, y logro que el chico se ría un poco.

-S-Soy S-Spencer, S-Spencer Sco-Scott.-Dice.

Qué lindo nombre.

-Soy Skylar, Skylar Collins, pero dime Sky, si no quieres que parta tu trasero de estirado.-digo pateando su trasero con mi pierna.

Él ríe.

-E-Eres l-la u-única ch-chica que-que s-se a - atrevido ha-hablarme.-dice sonriendo.

Hago una mueca, vaya, esto es incómodo.

-Me alegro ser la primera, chico.-digo revolviendo un poco su cabello.

Él ríe.

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-¿T-Te f-fuiste d-de t-tu casa?-preguntó con curiosidad, asiento.

-Si, bueno, estoy castigada, y pues, mi barriga quería un helado.-Digo.

-M-Mi m-mamá m-me m-mataría s-si m-me fu-fuera de c-casa.-dice, echándole un ojo al libro que estaba leyendo.

-¿Qué lees?-pregunto. Este me muestra el libro y abro mi boca sorprendida.

O.Mi.Dios.

-¿Te lees Tres metros sobre el cielo?-chillo emocionada. Él asiente riendo.

-Si, amo este libro.-Wow, era la primera ves que no lo oía tartamudear.

-Gracias, ¡al fin!-chillo sorprendida.

-Me sentí mal cuando mataron a Pollo.-dice.

Si, que en paz descanse, pollo.

Miro el reloj, y abro la boca.

-Son las seis y media, qué pena, me tengo que ir.

Corro hasta la mansión, y me pongo roja cuando veo a Paul mirándome atentamente.

-¿Qué son estas horas de llegar, niñita?-

Mierda.