Capítulo 11

1K 68 5
                                    

Me desperté, no sin antes captarme de aquella presencia a mi lado que me rodeaba con sus brazos. A un era de noche. Busqué el móvil para ver la hora. Eran las cuatro y media de la mañana.

Iluminé su rostro con el brillo de la pantalla. Su cabello revuelto y sus labios secos, que, me entraban unas enormes ganas de lamerlos.

Me senté al borde de la cama sin hacer mucho movimiento para no despertarlo. Unos segundos mirando a un punto fijo y el insomnio venía a mi.

Se que esto parece estar salido de una película cliché. El chico que estuvo enamorado de ti desde hace tiempo y se ha convertido en tu mejor amigo te confiesa su amor y ahora son novios. ¡Qué loco! ¿no? realmente no todo es color de rosas. Nada es para siempre. Pero lo disfrutaré al máximo mientras dure.

Yo tampoco aguanto tanto tiempo sin él. Soy tan egoísta. Pero no puedo evitarlo. Se que antes de conocerlo podía aguantarlo, pero ahora está el, ocupando el lugar de la soledad en mi vida.

—Hola cariño. —su voz soñolienta apareció acompañado de un bostezo.

Me asusté al oír su voz. No me había dado cuenta que mis ojos estaban mojados. No es normal en mí llorar mucho.

—Hola Luke —dije volteándome para secar esas lágrimas locas. Me da vergüenza llamarle "amor" o cosas así.

— ¿Ocurre algo? luces triste. —se incorporó prendiendo la luz y envolviéndome en sus brazos.

¿Cómo podía darse cuenta de que algo me pasaba?

—No, todo bien. —mentí y me acomodé un su pecho.

—A ver, te conozco, se cuando te pasa algo. —besó suavemente mi cabeza. —Dime que pasa amor, confía en mí. —acarició mi mano.

Sus palabras demostraban tal seguridad que podría lanzarme a sus brazos a llorar contándole todo lo que siento y él me comprendería. Pero al contrario, decidí contenerme.

—Sólo es el insomnio que me hace pensar tonterías.

No dijo nada, pero me envolvió en sus brazos. Y luego me besó, le seguí.

Los besos se iban haciendo cada vez más apasionados. Pero nos obligamos a parar cuando un estruendo en la planta baja nos asustó.

— ¿Qué rayos fue eso? —cuestioné intrigada.

—Debe ser mi mamá yendo al baño. No te preocupes. —intentó calmarme.

— ¿La habremos despertado nosotros?

—Podría ser, a un que su habitación es al final del corredor.

Otro sonido se escuchó, pero esta vez más fuerte. La casa de Luke es muy espaciosa y nosotros nos encontrábamos en en segundo piso. Aproximadamente en la puerta del medio.

—Luke...

—Shh —me calló.

Se quedó quieto. Atento para prestar atención a cualquier otro sonido.

Ahora eran susurros. Voces masculinas.

— ¿Ya sacaste las cosas? —silencio. —Apúrate, antes de que despierten. —silencio. —Okey, yo iré a revisar la habitación de arriba. —se escuchaba por el otro lado de la puerta.

Odio que pasen estas cosas. Tengo miedo, sobre todo de noche.

—Quédate aquí, no salgas. Yo iré a revisar.

—No Luke espera, llamaré a la policía. ¿La puerta está con pestillo verdad?

—Así es. —se levantó de la cama y colocó su oreja junto a la puerta.

Sólo cuéntame » luke hemmings {en edición}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora