#4 Capitulo

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"Tal vez dijo eso porque, como él ya va a estar en la universidad, y tu te quedas aqui, no quiso decir lo que en verdad siente por no querer llevar una relación a distancia"

Esa, era una de las muchas cosas que Karla, y demás personas le habían dicho, para querer excusar la respuesta de Jack. Para que no terminara odiándolo.

Pero ella no creía ninguna. Si él había dicho eso era porque era lo que sentía. Más bien lo que no sentía. ¿Y entonces porqué actuó así? No lo sabe, pero ya no importa. Ya nada importa.

Ahora él se ha ido, y se ha llevado la mitad de su alma con él.
Y estaba segura de que no querría volver a verla por un buen rato. Y para ser sincera, ella tampoco podía verlo a la cara.

Sus amigos no la veían tan decaída como creyeron que estaría. Giselle actuaba como siempre, riendo y sonriendo ante todo mundo. Pero por dentro estaba más destrozada que nunca. Y es que, muy dentro de sí, tenía una esperanza de que quizás, sólo quizás, Jack sí la quería... pero pues, ya entendió que no.

De pronto recordó el día en que se conocieron, y una lágrima rebelde logró escaparse, pero ella la limpió antes de que alguien pudiese notarlo. Jack la había invitado a un paseo con sus amigos. Ella les había rogado a sus padres que la dejaran, gracias al cielo no lo hicieron... porque si hubiera ido, las palabras de él le hubieran dolido mucho más, y eso sí que no lo soportaría.

Y el tiempo pasó. Pasaron de año. Él entró a la universidad. Ella sólo a segundo año. Los meses que pasaron le sirvieron de mucho a Giselle para superar lo de Jack. Si bien era cierto que aún lo quería, eso no significaba que iba a estar llorandole toda la vida. Si tantas veces ya había superado males de amor así, por supuesto que podría con uno más.... o eso quería pensar.

Los primeros días del año no fueron muy buenos, Giselle lo extrañaba como una loca. Cada rincón en el que habían estado juntos le hacía recordarlo.
Ese día en especial había sido perfecto. Ver a una pareja de gays besándose todo el día, para una fujoshi como Giselle era lo mejor que le pudiera pasar. Sí, incluso mejor que Jack.
Cuando hubo llegado a su casa, lo primero que hizo fue revisar su bandeja de mensajes de facebook y vaya sorpresa que se llevó...

"Jack Demons: Hola"

Genial. Justo cuando estaba segura de que lo olvidaría, tenía que hablarle. Creyó que estaba alucinando, porque Jack nunca NUNCA le había hablado en facebook.

Y esa conversación, que terminó con una promesa de parte de él de que iría a verla el día de su cumpleaños, fue suficiente para ponerle una sonrisa en los labios por el resto del día. Incluso le tomó captura a la conversación para mostrársela a Karla.

Estaba inmensamente feliz. Al día siguiente en la escuela, nadie ni nada le quitaba la sonrisa del rostro.
El sólo recuerdo de algo así le hacía que la manada de unicornios salvajes en su estómago se volvieran una explosión de unicornios ahí dentro.

"Vaya, después de todo parece que él no me odia" pensó. Sus ideas de que Jack no querría volver a verla se disiparon cuando releía la conversación una y otra vez.

Y es que, quién sabe. Tal vez Karla tenía razón, tal vez sí tenía una mínima oportunidad con Jack...

Destructive loveTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang