Mi maestro de Biología

Capítulo: O6

Le quité el vaso que tenía Mayra en su mano izquierda. Tomé lo poco que quedaba de cerveza y me acerqué a los nuevos visitantes.

Yo: OIGAN.-grité para que me escucharan.

Ellos de inmediato fijaron la mirada sobre mi.

Rubén: ¿___? 

Reí y asentí.

Yo: ¿HAN VENIDO A DIVERTIRSE, EH?-me acerqué a Rubén para abrazarlo confiadamente.

Rubén: Estás muy borracha.-dijo tratando de separarse.

Yo: Ay, pero claro. ¡Es una fiesta! vine para pasarla bien. ¿Ustedes también vinieron para eso, no?

Rubén: Si, pero...

Yo: Vengan, todavía ha quedado media caja.-lo traje de la mano y su amigo nos siguió.- Eh, pasen un par. Que estos también quieren unirse a la fiesta.

Los 10 que se encontraban en la ronda, gritaron para animarlos. Como yo, estaban pasadísimos de copas. Mayra me pasó un cigarrillo. 

Jordan: No seáis tímidos.-dijo pasando la botella a Rubén.

No pasó mucho en que estos dos aceptaran nuestra invitación. Entre risas y bromas, decidimos jugar a la botella borracha.

New Thang de Redfoo, sonó de fondo.

Todos gritamos un "Wuuuu" saltando y bailando al ritmo de esa canción.

Rubén al parecer ya estaba entrando en confianza. Me quitó el cigarro que estaba a medias, lo miré y dediqué una sonrisa coqueta. El hizo lo mismo.

Mayra: Vale, ¿y si subimos? -propuso Mayra.

Jordan: ¿Qué dirá Claudia?

Mayra: No creo que se enoje. Además, mírenla, está por allá de lo más distraída.

Con risas traviesas, todos subimos al segundo piso. Rubén y su amigo también nos siguieron.

Al entrar en una habitación, prendimos la luz y nos acomodamos para jugar.

Mayra: Bien, ya ustedes saben como es. A los que les toque, se irán al baño de al frente, y tendrán 10 minutos para hacer lo que quieran.

Todos estuvimos de acuerdo. Jordan fue el primero en girar la botella.

Para serles sincera, yo quiero que me toque con mi profesor de Biología. Y si, aprovecho de que estoy borracha para confesar de que me gusta. Mucho.

En la cuarta vuelta, creo que mis ojos ya no estaban bien, por que me pareció que nos tocaba a mi y a Rubén.

Lo miré y el también a mi. No sabía que decir.

Mayra: Ok, parece que os toca divertir un poco, ¿eh? -me miró con cara de complicidad.

Yo: No se que dirá Rubén...-dije un poco desanimada.

Rubén: Por mi no hay problema.

Sonreí torcidamente. No se si fue una sonrisa coqueta, o una tímida.

Nos pusimos de pie y fuimos al baño. Cada segundo me ponía más nerviosa.

Rubén: ¿Y bien? ¿qué se supone que hagamos?

Yo: No lo sé... ¿Qué quieres hacer tú?

Rubén: Mm, ¿qué tal hablar un poco?

Yo: Suena bien...

No.

Rubén: Oh, espera. Creo que se te corrió el maquillaje.-se acercó y me limpió con uno de sus dedos la parte baja de los ojos.