Gritando en la Almohada

Spider¿man?

           Saltan las grandes mentes maestras detrás de los más bellos, valientes y temerarios superhéroes de nuestra historia. Hombres capaces de salvar a un bebe de las llamas del fuego y a la vez levantarse a la madre con sus galantes sonrisas y sus hoyuelos perfectamente ubicados. Y es que si, estos hombres les bajan las medias a cualquiera. Grandes héroes vestidos con trajes a veces muy ridículos, pero muy favorecedor a las dotes que la naturaleza les ha regalado a manos llenas. Así como a las mujeres nos han vendido a lo largo y ancho de nuestra vida a esa bellas e inútiles princesas, deseosas de un tipo para que viniera a rescatarlas, a los hombres les han vendido la figurita de acción capaces de salvar al mundo en 3 días y uno ni se explica de forma lógica cómo lo han hecho y por qué son tan fortachones. No sabemos qué pensó Stan Lee en el momento que creó su séquito de Marvel, pero, lo que sí puedo afirmar es que su alter ego se saltó diez pueblos y se inspiró en las situaciones y personas equivocadas.

            Tanto el mundo de fantasía Disneyliano, como el Marveliano nos jodieron la vida. Las mujeres jugamos a ser la más bella y cuando nos llaman princesas andamos viendo corazones donde no los hay y, por su parte, los hombres se creen la novena maravilla del mundo y sienten que en cualquier momento pasarán de ser el nerdo de Clark Kent, al indomable y sexy Superman. Lamentablemente, la realidad nos muestra que, no te hace princesa el que un hombre te lo diga, ni te vuelves Superhéroe por meterte a un gimnasio y ponerte buenote, empiecen a bajarse de esa nube de estupefacientes en las que están. Cada día que pasa confirmo que John Gray se equivocó con el nombre de su libro "los hombres son de Marte y las mujeres son de Venus" yo, en lo particular, lo habría titulado "Los hombres son de Marvel y las Mujeres son de Disney" ¿saben no? Por seguir con esta línea de locos argumentos, pero entre gustos y colores todo se vale. ¡Nos chuparon el cerebro!

             Hace tiempo ya que vengo haciendo mis artículos un poco más imparciales –al menos eso intento- digo, para que luego no vayan por los pasillos diciendo que esta Atenea está loca, es una feminista y lesbiana. Porque a la población mundial le fascina hablar la paja pareja y pues antes que pongan en entredicho mi más que intachable y decidida inclinación sexual (hetero) prefiero hacer la aclaratoria. Pero es que no puedo negar que estos mundos de los que vengo hablando nos vendieron mal la idea. En el mundo real se ve de todo, hombres que tienen de superhéroes y valientes lo que yo tengo de monja, ven una cucaracha y si vuela corren despavoridos ¡Ah qué hombres tan valientes! y mujeres que son unas María la del barrio cualquiera, ordinarias hasta el tuétano y de princesas solo el apodo y en chiste con un kilo agregado de sarcasmo.

          Ustedes como siempre se estarán preguntando ¿qué tanta paja loca habla esta mujer y por qué el título? Saben que yo hago todo un preámbulo para llegar al punto, ya deberían estar más que acostumbradas. La verdad es que tengo un par de días reflexionando acerca de los dones de este superhéroe, y echando cabeza digo ¿en qué carajo se habrá inspirado el autor de Spiderman (que no es Stan Lee) para crear todas las facetas y habilidades de este personaje? Ya saldrán ustedes letrados a decir "¡En arañas pues!" y saldrá una muy sarcástica Atenea a responder "Les van a dar el Pulitzer de bauxita cromada, y es que son tan inteligentes que un simple trofeo de oro no es suficiente para valorar su magnificencia"...

            Es obvio que en una araña, pero mi pequeña reflexión personal va más allá, si se supone que una de las arañas más famosas es la magnífica Viuda Negra y esta pequeñísima se viola a sus parejas y se los vuela pal otro lado del charco ¿por qué rayos ponerle SPIDERMAN? O sea, ya va, paren el carro allí... Acaso las mentes maestras de este arácnido superhéroe nunca vieron las habilidades de araña que despliega a sus anchas una mujer diariamente. A ver, piensen un poco: Hay mujeres que paren muchachos como si estuvieran rifando espermatozoides en pleno mercado libre, y éstas tienen que alimentarlos a todos a la vez, lo peor es que se multiplican y es como si tuvieran ocho brazos, díganme cuando van al médico con ese poco de carajitos a cuesta.

             Luego vemos a una mujer con unas habilidades sobrehumanas para saber cuando están hablando paja de ellas o cuándo el marido, novio, marinovio, amigovio tienen otra, eso supera cualquier sentido arácnido de pacotilla. Y si hablamos de pegarse a las paredes tener súper fuerza y equilibrio, definitivamente estos desfasados no vieron a una mujer yendo a un baño público jamás en su vida, es todo un arte eso de pararte a veces de puntillas con las rodillas flexionadas, con el bolso al cuello si no tienes a una amiga cerca, el celular en una mano porque no confías en el bolsillo del bolso, ruégale a Dios que no se te quede el papel dentro de la cartera y apunta bien para que ninguno de tus fluidos te chispee, tomando en cuenta que para el momento que estas en posición tus piernas empiezan a temblar cual gelatina. Eso, sin contar que muy posiblemente el baño no esté en condiciones y haya un charco de un líquido químicamente no identificado que es mejor ni ver, y por si fuera poco salir de ese minúsculo cubículo sin un pelo fuera de lugar. ¡¿Todavía preguntan por qué tardamos tanto en el baño o por qué vamos acompañadas?! ¡Joder! Esas son las penurias de un baño.

                Entonces, vienen estos seres muy inteligentes a darles estas súper habilidades a un tipo flacucho que de un día para otro se puso buenote porque lo picó una araña y a nosotras que los tenemos sin que nos pique un mosco ¡Qué nos coma el tigre! Nosotras somos la pelirroja Mary Jane. Lo que sucede es que escribir Spiderman es más corto que Spiderwoman y saben que el traje rojo con azul y ni hablar del negro serían un derroche de chenchualidad en nosotras, punto.

               Total, que mientras en el mundo Disneyliano somos las mujeres de cristal que nos tienen que venir a rescatar, en el mundo Marveliano somos la damisela en apuros, amante del superhéroe y cuándo tenemos súper poderes somos las asistontas perfectas, el relleno para que luego no digan que son machistas. Pero que importa, eso es pura ficción y en la vida real siempre es divertido andar sentado de glúteos a la gente y bucearnos al nuevo muñeco de acción. Mientras que los súper hombres les inflan el ego a algunos, para nosotras son un poco de colirio para estos ojos que se cansan de ver tanto bagre subnormal.

AteneaWp

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Holaaa! les dije que volvería.. me tardé un poco más que un par de horas pero es que se me complicó la cuestión, pero aquí estoy. Les dije que pensaran en superhéroes y espero no decepcionarlas jajajaja.. Se me cuidan, besitos.