⋆ XI ⋆

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∩⁠。⁠•⁠ Leonardo

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∩⁠。⁠•⁠ Leonardo. N ⁠•⁠。⁠∩.

–Entonces... ¿Enserio vas a seguirla?. –Asentí despreocupadamente, Pero mi amigo me miró como si hubiera perdido completamente la cabeza. –Qué amistad más rara la de ustedes, ¿Y qué harás con tu novia?.

–Ella no importa, quiero irme con Bet.

–¿Y te irás con ella a ese país? Ni siquiera eres su tipo, Leonardo –El chico soltó una carcajada rígida y le dediqué una sonrisa ladina

–La labia existe por algo. Quiero enserio ir detrás de ella, es linda –Confesé y miré a la castaña dormida en su asiento a tan solo unos metros de nosotros.

Betzabé...

Siempre fue una de las personas más dulces y lindas que conocí.

Pero no me era suficiente ser solo su amigo...

Me gustaba verla sonreír, y el último año de nuestra escuela se pegó a mi como un chicle. No pude sentirme más afortunado cuando estábamos a solas mientras ella lloraba en mis brazos por las cosas que le pasaban en su vida, cosas que no me contaba del todo, pero hacían que pudiera ver esa faceta vulnerable de ella.

Nunca quise lastimarla...

Pero siempre se alejaba de mi.

Aunque al inicio no me di cuenta, sentía que quería tenerla conmigo.

hasta que la Vi ese primer día de clases.

Sabía que yo no era su tipo, pero observarla con ese chico asiático hizo que se me olvidara incluso que en nuestro país natal tenía novia.

Esa sonrisa... Esos ojos... Sabía, como hombre, lo que significaban. Era imposible no darse cuenta cómo ese chico buscaba acercarse de todas las maneras con excusa de ser su mentor.

Y yo sólo intentaba cuidarla.

Justo como lo prometí a su padre...

Justo como lo habíamos acordado...

Pero no fue hasta que los ví a los dos besarse meses después del inicio de clases en una noche que finalmente caí en cuenta que ya era muy tarde.

Bet empezó a dejarme solo, empezó a pasar más tiempo con él. Me desplazó completamente.

Y ante los ojos de todos... Solo eran superior y la chica del primer año a quien guiaba. Pero tras esa supuesta amistad, sabía cuantas veces a la semana ella llevaba saliendo con él en las noches y a donde iban.

Pero mi paciencia acabó cuando descubrí quién era él: Jake sim.

Resulta que era un chaebol, y tenía una futura prometida.

Sabía que solo usaba a Bet como un juguete.

Así que decidí actuar.

Empecé a decir a todos que bet era novia de jungwon, que usaban su amistad de fachada y que Jake intentaba seducirla, y él rumor se empezó a expandir. No pensaba que eso le fuera a afectar tanto, hasta que note lo que decían de ella.

Obvio, sabía también con los ojos de jungwon que tampoco la veía normal, así que solo sirvió para que siguieran las sospechas.

Poco a poco empecé a ver esa sonrisa apagarse, y la reputación de ella empezó a caer en picada gracias a que Jake era presidente del consejo estudiantil. Jungwon empezó a dialogar por ella gracias a que si Jake lo hacía se daría en evidencia lo que realmente sucedía, pero al notar que seguían viéndose, crecían mis celos y empecé a inventar más cosas.

Si, dije que ella era promiscua.

Dije que ella y Jake ya se habían acostado.

También que me asegure que los que dispersaron esa información hayan dicho también que eso "me lo dijo Bet".

¿Y qué?

Solo lo hacía para protegerla.

Sin embargo, ella nunca lo vió del mismo modo.

–¡Bet, espera! –Grité corriendo detrás de ella y deteniendola apenas tomando su brazo, Pero ella se soltó bruscamente.

–¡Vete al C*rajo Leonardo!– me gritó y me dió una cachetada, humillándome. Tomé su muñeca y la apreté para detenerla, y la miré a los ojos.

–¡Lo hice por tu bien, para él solo eres un maldito chiste!– ella me empujó y yo la empecé a seguir cuando me dió la espalda. –¡Nadie te amara como yo, él te ve como un mald*to juego!–

Bet soltó una risa fría y me miró a los ojos con su mirada cristalizada –¿A quién mi*rda estás protegiendo? Porque a mí solo me hundiste. Ojalá y todo lo que hagas se te devuelva. –Volvió a mirar hacia adelante y siguió caminando, Pero no me gustaba ésta actitud suya.

–No te dejaré ir tan fácil.

–¡Déjame! –Gritó cuando la acorralé en una pared y empecé a presionar sus muñecas contra la misma.

–¡Estoy cansado de verte con él. Nadie te merece tanto como yo! ¡Yo estuve ahí cuando estabas en tus peores momentos!– exploté. –¡Lo dejas o hago que te arrepientas!.

Y así fué como todo terminó, ella me volvió a dar una cachetada y me miró con odio por primera vez de muchas.

–¡J*dete, Leonardo!– me tiró su bolso.

Pero yo no pude evitar soltar una risa fría. Fue en ese momento que tomé una decisión.

Me prometí a mí mismo demostrarle que tenía la razón, y todo solo parecía darme señales para que pudiera poner en marcha el plan y cumplirlo.

Por eso lo provoqué.

Por eso me dejé golpear por ese imbécil, y cuando lo destituyeron de ser presidente del consejo no pude evitar sentir alegría, porque me encargué de personalmente llevar evidencias de un supuesto aprovechamiento de poder de su parte, aunque no sirvió como quería porque solo ocultaron todo.

Y por eso... También acepté ir con éste hombre y trabajar con él cuando me buscó.

Jake había dejado de hablarle, y ella había sumido su vida en la desesperación. Todo gracias a mí, me sentía orgulloso de mí mismo.

Pero al menos ya no estaba con ese imbécil.

Lo superaría, estaba seguro.

Porque si no estaba conmigo, no estaría con nadie.

–Leonardo, quiero que evites cualquier contacto con mi hijo y esa jovencita. Mis hombres estarán vigilando de cerca sus pasos, pero quiero que hagas tu parte. –miré al hombre sentado delante de mí y le dediqué una sonrisa ladina, sabía a lo que se refería. –Te pagaré bien, Pero debes seguir presionando. No quiero estorbos.

Le dediqué una sonrisa al señor y asentí silenciosamente.

Así era mi trabajo.

Hacer lo sucio por ella, porque si hacía lo sucio podría limpiar suficiente como para un día lograr estar con ella sin trabas.

Y me aseguraría de hacer lo posible, incluso lo imposible, para que nada se interponga en mi camino; ni siquiera el mismísimo hijo del jefe.

Y me aseguraría de hacer lo posible, incluso lo imposible, para que nada se interponga en mi camino; ni siquiera el mismísimo hijo del jefe

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⟨⟨ The Polaroid ⟩⟩ - Jake Sim.Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang