Vuelta a casa.

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Capítulo 41: 

Llegamos a la casa de Nash los cuatro, sí Josh también venía con nosotros gracias a la amabilidad de la mamá de Nash, ella era tan cariñosa, es como si reflejara a mi mamá en ella o como era conmigo antes. Desempacamos todo, aquí no podía dormir en la misma habitación con Nash por respeto a todos pero dormiría en la de al lado, dejé mi ropa ordenada un poco y pronto llegó Sky conmigo. 

- ¿Porque me mentiste? - Dijo ella con su voz de niña pequeña que te hace derretirte en una milésima de segundo. 

- ¿Porqué dices eso? - Respondí con una pregunta también.

- Porque me dijiste que nunca dejarías a Nashty pero si lo hiciste, me mentiste Megan, mentir es malo - Dijo ella abrazando a su caballo contra su pecho mientras lo mecía. 

- Oh, bueno lo siento, no era mi intensión dejarlo de esa manera pero hay cosas que no lograrás entender, lo importante es que ahora estamos juntos y tú y yo podremos jugar todos los días ¿me perdonas? - Dije, ella asintió y corrió a abrazarme. 

- Te extrañé - Dijo ella, todo en ella era tan tierno.

- Y yo a ti pequeña, ¿vamos a jugar un rato con tus caballos? - Dije, ella asintió y me tomó de la mano para irnos a su habitación a jugar. 

Después de estar con Sky como una media hora jugando a los caballos, Elizabeth nos llamó a cenar y nosotras dos fuimos corriendo. Nos sentamos a la mesa y comenzó la comida, todo iba bien hasta que llegó a un tema que no quería tocar ahora. 

- ¿Has sabido algo de tus padres? - Preguntó Elizabeth, un silencio incómodo se formó en la mesa. 

- Mamá...- Comenzó Nash haciéndole una cara.

- Oh, lo siento, no quería incomodarte Megan - Dijo ella, yo le sonreí.

- No, no importa, en verdad no he sabido de ellos pero iré a mi casa unos días para ver que pasa o que pasó con ella y todas mis cosas, necesito averiguar - Dije, ella asintió.

- Bien pero por favor esta vez ten cuidado, no quiero que te pase nada malo - Dijo ella, ¡oh good! Vamos, ella era como una madre. 

- Sí, tendré más cuidado esta vez - Dije y reí. 

Luego todos fuimos a nuestras habitaciones, fui a lavarme los dientes y luego fui al cuarto de Nash quién jugaba con su celular mientras hacía snapchats. 

- Mi hermosa novia - Dijo él, en su vídeo mostrándome. 

- Hola - Dije y reí. 

- Sabes que mis fans te aman y quieren que me case contigo - Dijo él revisando ahora su twitter, me junté más a el para abrazarlo. 

- Sí y, sí - Dije, reí. 

- Y que esperas entonces, solo tienes que darme el sí - Dijo él, yo reí por su acción de chica ruda. 

- Cuando me lo pidas entonces te diré sí - Dije, le di un beso y me fui a mi habitación. Me puse la piyama y algo de crema, hice una coleta y fui a apagar la luz, por el balcón se apareció una sombra, me asusté un momento al ver que no se movía y se quedaba allí parada, un mensaje llegó a mi móvil; Abre la ventana, Nash. Maldito me hace asustarme. 

No pude hablar porque me besó al instante y luego me levantó para acostarnos ambos en la alcoba, tranquilos. 

- 2 DÍAS DESPUÉS-

El taxi hacia mi casa cada vez se acercaba más, me ponía más tensa, ¿que habrá pasado con mi casa? ¿la habrán vendido? ¿estarán mis cosas?, no lo sé y la curiosidad me carcomía cada vez más, mis piernas temblaban. 

- Oye tranquila nena - Dijo Josh. 

- Sí pero, ya sabes... - Dije, el asintió, le pagué al taxista y nos bajamos. Mi casa estaba intacta, o por lo menos por fuera lo estaba. 

Metí las llaves y giré el pomo, todo en ella estaba igual, como la última vez que vine. En verdad nada había cambiado, dejé la maleta ahí y fui a mi habitación, estaba toda desordenada, papeles en el suelo, todo derramado. Había una nota encima de mi mesa de noche, la tomé; Cariño, espero que puedas perdonarme, mamá. ¿Cuándo había dejado esto? ¿Ella vino a la casa?, Josh llegó conmigo. 

- ¿Que dice? - Dijo él, un estruendo se sintió abajo, como si la puerta hubiese sido llevada por una bola de demolición, le hice a Josh con mi dedo para que se callara, el asintió y se agachó en el suelo, tomé un jarrón de vidrio y lentamente comencé a bajar por las escaleras, no había nadie. Entré a la cocina y una persona, más bien, una mujer. 

- ¿Que haces aquí? - Le pregunté a la que llamaba mamá. 

- Megan yo...


Magcon - Nash Grier.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora