–Si te quieres ir ya podemos irnos juntas, sino yo vengo a traerte a la hora que te quieras ir– se ofreció Lea.
De lo que no se había percatado era que Lesslie estaba ahí, había llegado junto a las dos hermanas.
–Yo puedo llevarte a la hora que te quieras ir– habló Lesslie haciendo que las cuatro chicas la voltearan a ver, una de esas cuatro con confusión.
–La llevaré yo, no te molestes– le respondió Emily
–Yo creo que mejor me voy con Lucía y Lea– habló la pelirroja.
–Pues... No es por nada pero sería mejor si aceptaras que una de las dos te lleve porque ahorita no caben más y no sabemos cuanto tardaremos.
Alice estaba indignada, le acababan de decir que se fuera en otro carro porque su carro lo iban a ocupar ellas para ir a dejar a otras personas.
–Bien entonces la llevo yo– dijo de nuevo la de lentes.
–Le debo esto a Alice, la llevaré yo– formuló la de menor estatura con insistencia.
Mientras tanto las tres chicas miraban con confusión a las otras dos que se peleaban por llevar a Alice.
–¿Entonces te irás con alguna de las dos?– preguntó la menor de las hermanas.
–Si, vayanse ustedes– respondió Brown aún desconcertada por la situación.
–Bueno, cuidate– se despidió su amiga con una sonrisa.
Ahora se encontraba solo ella con las dos chicas que se ofrecían en llevarla.
–Le puedo decir a alguien más que me lleve, tranquilas– dijo un poco abrumada.
–No no, te llevaré yo, me queda de paso– habló Emily viendo a la pelirroja.
–No quiero presionarte pero puedo llevarte sin problema, de hecho sirve y nos conocemos más– expresó la de pelo lacio. Su insistencia estaba irritando a Emily.
Las dos se encontraban expectantes a su respuesta.
–A Emily le queda de paso– respondió Alice viéndolas a las dos. –Me iré con ella pero de igual manera, gracias, hablamos luego.
–Bien, te escribo entonces– dijo la de lentes con una sonrisa para luego irse.
Mientras tanto Emily se encontraba con una sonrisa, no sabía porque pero que Alice la eligiera a ella le causó cierta felicidad, aparte que prácticamente había ganado contra la aún desconocida para ella, pero eso no importaba tanto, le importaba más el hecho que ella la eligiera.
–¿Te quieres ir ya?– dijo volviendo su atención a la pelirroja.
–Si, ya tengo un poco de sueño.
Se fueron al auto de la mayor y tomaron camino.
–¿Por qué tanta insistencia?– preguntó la de ojos miel ahora que estaban solo ellas dos.
–¿De que hablas?– si sabía de que hablaba.
–El traerme tú, ¿Por qué?
–Solo quería devolverte el favor, además que ni siquiera la conoces– dijo la castaña con las manos al volante.
–¿Por qué aseguras que no la conozco?
–Sé que la conoces, es obvio, pero ¿hace cuanto?– habló la más baja viéndola de reojo.
–Ahora la conocí– contestó sabiendo que tenía razón.
–Ves, solo quería cuidarte, aparte de que estaba siendo insoportable– dijo con una mueca.
–Es amiga de Lucía y no es una mala persona– habló la menor intentando defender a la chica.
–Apenas la conoces, no puedes saber eso– formuló mientras pensaba en algo. –¿Te gusta?
–¡No! Apenas la conozco– dijo de inmediato.
–Bueno, es linda– habló Parker un poco desanimada.
–Si, pero no me interesa, no la conozco– dijo la pelirroja volteando a ver a su compañera, quien tambien la volteo a ver y le sonrió.
–Entonces, ¿me avisaras cuando vayas a ver el departamento?– habló la castaña mientras aparcaba su auto enfrente de la casa de las gemelas.
–Si, te avisare– respondió mientras se desabrochaba el cinturón de seguridad. –Gracias por traerme.
–Fue un gusto traerte y eso que me costó casi una pelea– bromeó haciendo reír a la pelirroja.
–Nos vemos en el trabajo– habló para luego darle un beso en la mejilla a Emily y salir del auto, quien se fué hasta que esta entró a la casa.
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Invisible String
RomanceA lo largo de los años se han rehusado de conocerse; cuando se conocen entienden que ese era el momento.
