100 letters to izuku

aprender a olvidar

El trayecto a casa fue silencioso.

En cuánto Izuku se alejó de Katsuki, llamó a su madre para que pasara por el. Inko estaba preocupada por Izuku pero no le preguntó nada, sabía que era Katsuki siempre había sido un tema complicado para Izuku. Nunca le preguntaba si Katsuki lo molestaba en secundaria cuando veía pequeños moretones en sus brazos o regresaba a casa con los ojos rojos e hinchados. Le preguntaba si sufría de bullying pero no más que eso.

Izuku era consciente que debería volver a los dormitorios o preguntarle a Aizawa sensei si podía quedarse en su casa. No quería volver a ver a Katsuki, al menos no por ahora. Su alma fue destrozada, Izuku sabía que pasaría en algún momento pero no pensó que tan pronto.

Pero Izuku seguía pensando en cuando Katsuki dijo que "así era con todos". Eso enfureció a Izuku, el nunca fue tan especial para Katsuki como él lo era para Izuku.

¿Como fue tan estupido para pensar que a Katsuki le importaba?

Izuku realmente estuvo sintiendo que lo miraba con amor, un amor que él se inventó.

Porque Katsuki nunca lo hizo.

Al llegar a su casa, se derrumbó en la cama. Extrañaba lo que nunca fueron pero necesitaba dejar de pensar en el, solo hacia las cosas más dolorosas. Izuku se tenía que centrar en la escuela, que iniciaría en poco tiempo.

Enseguida llamó a Aizawa sensei y le preguntó si podía quedarse en casa, este asintió y le dijo que estaba bien.

Izuku tuvo que regresar a los dormitorios por sus cosas personales, al entrar no vio rastro de Katsuki por ningún lado. Una parte de él estaba aliviado de no tener que ver a la persona que te rechazó pero otra parte de él estaba ansiosa por verlo.

Eso odiaba Izuku.

Katsuki podría desgarrar su corazón, romperlo e ilusionarlo pero Izuku siempre seguiría enamorado de él.

Es triste, porque Izuku siempre estará amándolo no importa que haga.

Katsuki lo enamoró sin darse cuenta, después le rompió el corazón tal y como lo enamoró, sin darse cuenta.

Izuku lo amo cuando las razones para odiarlo eran muchas.

Demasiadas. Katsuki merecía el odio de Izuku después de molestarlo toda la secundaria, decirle que nunca sería un héroe y que debería suicidarse.

Katsuki había sido un idiota con Izuku.

El pecoso agarró sus cosas y regresó a casa.

No quería saber más de Katsuki.

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La vida sigue, pero no siempre es verdad. A veces la vida no sigue. A veces solo pasan los días.

Y lentamente Izuku y Katsuki se fueron volviendo desconocidos.

Ya habían pasado unos dos días desde que volvieron a clases, Izuku no le había dirigido la mirada al pelicenizo. Sabia que cuando le echara el ojo se derrumbaría ante el. No podía volver a caer en eso.

Se estaba intentando enfocar en la escuela, en sus amigos y exámenes. Pero era difícil cuando se sentaba justo atrás de Katsuki. Aizawa sensei estaba hablando sobre un viaje escolar que tendrían pronto pero Izuku solo se podía fijar en la cabellera de Katsuki siendo iluminada por los rayos del sol que entraban por la ventana. Pero no. Izuku no podía volver a enamorarse tan profundamente de él justo cuando este le destrozó el corazón en mil pedazos.